La postura de los gobernadores tras el DNU que avanza desregulando la economía
Varios mandatarios provinciales se expresaron al respecto en sus redes sociales. Ninguno salió a defender la decisión del Presidente. Si bien Pullaro consideró que varias iniciativas eran correctas aseguró que eso “requiere un gran acuerdo republicano, donde se respete la división de poderes y se valoren todas las opiniones e instituciones”.
El Decreto de Necesidad y Urgencia anunciado este miércoles por el presidente Javier Milei no pasó desapercibido entre la dirigencia política. Entre quienes se expresaron al respecto están los gobernadores de las distintas provincias.
Para el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, el DNU “tiene iniciativas que van en el camino correcto y benefician a la producción, y estaríamos en condiciones de acompañar, y otras que no están claras, o que pensamos que no tienen ninguna incidencia o mejora real para la vida cotidiana de los argentinos”.
Y explicó que “esperaba que entre las primeras medidas de una agenda de cambios hubiera una reforma impositiva por ley que incluyera una rebaja de impuestos a la producción. Como es el caso de las retenciones al campo, fundamental para el interior del país y particularmente para la provincia de Santa Fe”.
“Pero por sobre todas las cosas, creo que la economía necesita reglas claras, credibilidad y confianza. El desarrollo y el crecimiento de un país se obtienen cuando esas reglas perduran en el tiempo”, sostuvo. Pero pese a esto considero que para ello se “requiere un gran acuerdo republicano, donde se respete la división de poderes y se valoren todas las opiniones e instituciones”.
Por su parte, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, indicó que el DNU “avanza sobre facultades exclusivas del Poder Legislativo, derogando leyes sin pasar por el Congreso, eliminando decenas de controles estatales y habilitando la privatización de empresas públicas como YPF y Aerolíneas Argentinas”.
“Las grandes transformaciones deben ser discutidas, acordadas. Necesitamos reformas que se construyan a partir del diálogo y el consenso”, expresó el rionegrino.
Uno de los primeros en mostrar su sorpresa fue el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien aseguró que durante la reunión que tuvieron los mandatarios con Milei el martes les “pidió el apoyo para un paquete de leyes que no especificó, aunque se lo pedimos”.
“Hoy, a espaldas de la división de poderes, anuncia un decreto que sin necesidad ni urgencia pretende derogar un conjunto de leyes de todo tipo. Así, se propone privatizar todo, desregular todo, destruir derechos de los trabajadores, arrasar con sectores completos de la producción, rifar los clubes de fútbol y el patrimonio de los argentinos. Todo esto, sin pasar por el Congreso que podría sesionar y discutirlo. Le faltó decir “democracia: ¡afuera!”, señaló el mandatario bonaerense.
Mientras que el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, señaló: “Ir contra el pueblo argentino no es una opción. El DNU que anunció hoy el presidente es un avasallamiento de las facultades del Congreso, que además incluye medidas que atentan contra el desarrollo del país y que afectan a las argentinas y argentinos”.
“Los derechos conquistados a lo largo de los años no pueden ser eliminados a través de un decreto de necesidad y urgencia. Nuestra industria nacional, nuestros recursos y nuestras empresas no pueden ser perjudicadas con medidas que solo vienen a beneficiar a unos pocos”, expresó el riojano y agregó: “No vamos a negociar ni a ser partícipes de estas medidas que vienen por los derechos populares de todas y todos. Esta decisión que tomó el Gobierno nacional habla a las claras de que las medidas son solo para algunos sectores poderosos y en contra del pueblo argentino”.
Por último, sentenció: “Ya lo habíamos anticipado días atrás con las medidas adoptadas, 120% de devaluación, 800 pesos el litro de nafta, y quita de subsidios, que significan cierre de comercios, industrias y empresas, dejando trabajadores y trabajadoras en la calle. Este conjunto de medidas ratifican lo que dije: es un genocidio social”.
A su turno, el mandatario de La Pampa, Sergio Ziliotto, indicó: “A 40 años de su recuperación, la democracia vive hoy uno de los momentos más duros y tristes de su historia. El presidente y su equipo de gobierno han decidido subvertir la Constitución Nacional para imponer un régimen que tiene como principal objetivo concentrar aún más la riqueza en los poderosos, y sin interesarle el avasallamiento de los derechos básicos y el empobrecimiento de la enorme mayoría del pueblo argentino. La defensa de los derechos populares no se negocia, el respeto a las reglas democráticas menos aún”.
“Con su DNU, el presidente Milei ha equivocado el rumbo. La situación es compleja y estas medidas la agravan más. Le pido que busque el camino del desarrollo, de la generación de empleo, de la distribución de la riqueza. La quita de derechos nos conduce al abismo”, expresó el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella y agregó: “Es necesario que estas iniciativas expuestas en el DNU se debatan democráticamente como leyes presentadas formalmente en el Congreso Nacional”.