Atacaron la delegación del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) en Misiones y dejaron un cuchillo sobre uno de los escritorios como mensaje intimidatorio. Las responsables del área harán la denuncia en el Juzgado Federal.

Las trabajadoras ingresaron esta mañana a la dependencia y encontraron su área de trabajo dañada, con cajones y papeles en el suelo. Si bien no se robaron computadoras ni elementos de trabajo, se dieron vuelta los escritorios con el fin de encontrar algún objeto o prueba puntual.

Según pudo averiguar Data Clave con fuentes del espacio, creen que lo que buscaban era algún expediente, dado que "son muchas las denuncias pesadas" que tiene el INADI en materia de discriminación, aunque también hay muchas por violencia de género y trata de personas.

"Nosotras no tenemos cámaras de seguridad, por lo que podrían haber robado tranquilamente las computadoras, pero no lo hicieron. Lo que si se ve es que revolvieron papeles, posiblemente estaban en busca de un expediente. Destrozaron todo y hasta me dejaron un cuchillo sobre el escritorio", le expresó a Data Clave Silvia Risko, Delegada del INADI en Misiones.

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En la causa intervino la Policía misionera y se espera por el avance de la parte criminalística. Sin embargo, Risko le explicó a Data Clave que dio conocimiento a la Policía Federal para que intervenga a nivel nacional. A su vez, cuando termine el trabajo del área local, harán la denuncia correspondiente en el Juzgado Federal.

La Delegación Posadas, bajo la misión operativa del subcomisario Walter Gerardo González, constató que la puerta del ingreso al edificio fue violentada. La consulta se realizó con la Fiscalía Federal N°2 de Posadas, que dispuso levantar huellas del lugar y la recopilación de material fílmico de las cámaras de seguridad de la zona.

"Tenemos causas y denuncias que son pesadas, y la verdad es que tenemos muchos hilos por dónde tirar, pero hoy no se nos ocurre ningún caso puntual. Soy militante política de hace más de 20 años, y por la experiencia, da la sensación que este es un mensaje intimidatorio por alguien que se sintió amenazado", concluyó Risko.