El oficialismo acelera la reforma electoral mientras crecen las tensiones en La Libertad Avanza
Con el 2025 en la mira, el Gobierno busca avanzar en la implementación de la boleta única papel y la eliminación de las PASO. Victoria Villarruel, a cargo de la misión, enfrenta un escenario complejo marcado por las internas libertarias y la resistencia del PRO.
En un contexto donde la reconfiguración de los gobernadores dialoguistas en el Senado se entrelaza con la campaña electoral 2025, el Gobierno intentará este martes, a través de la vicepresidenta Victoria Villarruel, destrabar el debate sobre la reforma electoral. Este proyecto incluye la implementación de la boleta única de papel y un frustrado intento por eliminar las PASO.
La responsabilidad de esta misión recae en Villarruel, quien se ha posicionado como la principal interlocutora entre la Casa Rosada y las provincias. A las 15:00, la vicepresidenta recibirá en el Senado a los jefes de los bloques dialoguistas, en un encuentro donde estaba prevista la presencia del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien finalmente no asistirá, delegando en sus vicejefes, José Rolandi y Lisandro Catalán. Sin embargo, el verdadero eje de la construcción política entre los mandatarios provinciales y el Gobierno se encuentra en Karina Milei, la estratega electoral de La Libertad Avanza.
La reforma electoral, que el Gobierno impulsa con determinación, se superpone con las negociaciones políticas que buscan evitar la fragmentación del electorado entre el PRO y LLA frente al peronismo en las legislativas del próximo año. Mientras tanto, desde el PRO persiste la resistencia a eliminar la obligatoriedad de las PASO, a pesar de los altos costos que conlleva su implementación.
Simultáneamente, siguen de cerca los movimientos de sus aliados en el Senado, donde los gobernadores han formado un nuevo bloque, Encuentro Federal. Esta bancada, que responde a mandatarios como Ignacio Torres (Chubut), Martín Llaryora (Córdoba), Rolando Figueroa (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro) y Raúl Jalil (Catamarca), busca garantizar la gobernabilidad de Javier Milei, al tiempo que impulsan una agenda legislativa centrada en la boleta única de papel, la educación esencial, y una nueva ley de federalismo fiscal.
El jueves pasado, en un gesto de alineamiento político, Torres se reunió en la Casa de Chubut con representantes de tres bloques del Senado, lo que sugiere que el nuevo espacio podría ampliar su influencia. Este reacomodamiento es clave para el avance del proyecto de reforma electoral, que se basa en el modelo de boleta única utilizado en Córdoba, y que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados desde mayo de 2022.
Sin embargo, la eliminación de las PASO sigue siendo un punto de discordia. A pesar de los esfuerzos del oficialismo, no han logrado obtener el respaldo necesario, mientras que desde la Cámara de Diputados, el PRO, liderado por María Eugenia Vidal, impulsa un proyecto alternativo para mantener las primarias, pero de manera opcional.
En medio de este escenario político, las tensiones dentro de LLA no pasan desapercibidas. Villarruel, quien ha sido un pilar clave en la relación entre el gobierno nacional y las provincias, enfrenta crecientes cuestionamientos dentro de su propio espacio. El liderazgo de Javier Milei y su hermana Karina está siendo desafiado por sectores que cuestionan la centralización del poder y las decisiones estratégicas que podrían poner en riesgo la cohesión del frente libertario.
Así, mientras el gobierno avanza en la implementación de su agenda electoral, la interna en LLA añade un grado de incertidumbre a la ya compleja situación política. La capacidad de Villarruel para mantener la unidad dentro de su espacio y alinear a los distintos actores políticos será crucial para el éxito de la reforma y el armado electoral de cara a 2025.