El Gobierno promete un nuevo cruce con la CGT: reforma de las obras sociales y ¿nuevo paro?
Luego de los enfrentamientos por el salario mínimo, la semana podría arrojar nuevas disputas entre la Casa Rosada y los sindicatos. Javier Milei prepara la reglamentación de un capítulo del DNU 70/2023 para ir a fondo contra las obras sociales de los gremios y sumar una nueva tensión de cara a una posible medida de fuerza.
El gobierno nacional define por estas horas la publicación en Boletín Oficial de la reglamentación de una medida contenida en el DNU 70/2023 para la desregulación del sistema de salud que apunta directamente a una de las principales cajas de los sindicatos.
Una de las principales reformas que busca establecer la Casa Rosada y que empezarían a correr tras la reglamentación es que los beneficiarios puedan optar entre obras sociales y prepagas. En ese marco, se suprime el régimen que obliga al trabajador a permanecer un año en la obra social de su actividad al ingresar a un nuevo empleo. Se podrá elegir libremente desde el inicio de la contratación para un puesto laboral. Este derecho de optar se podrá hacer una vez al año. El movimiento que prepara Javier Milei fue adelantado por el periodista Eduardo Feinmann en LN+ y es comentada por todo el mundo libertario en redes.
La decisión que podría quedar establecida por BO en los primeros días de la semana suma tensión a una acalorada relación entre la CGT y el gobierno nacional. Al paro del 24 de enero, se suman declaraciones recientes del líder de camioneros Pablo Moyano tras las frustradas negociaciones por el salario mínimo vital y móvil. "En el Consejo del Salario el gobierno nunca nos dio oportunidad de charlar con los empresarios, es una modalidad del Gobierno llevarse por delante cualquier posibilidad de negociación. El Consejo de la CGT está autorizado para tomar las medidas necesarias, no vamos a poner fechas todavía, pero se está discutiendo el paro general", dijo Moyano en declaraciones a Radio 10.
Acto seguido, Moyano le advirtió al gobierno nacional que "se prepare" porque señaló que, desde la CGT, no serán "meros espectadores de cómo van a ir destruyendo el país y del avasallamiento a los trabajadores".
Por último, lanzó una advertencia sobre la situación del interior del país a la que calificó como “un polvorín”. "No voy a poner fecha en estos momentos, pero hay una discusión por las medidas a tomar. Marzo va a ser un mes muy conflictivo por el aumento de los colegios, los servicios y la política de ajuste contra los trabajadores", remarcó el sindicalista.
Desde la CGT desmienten que las Obras Sociales sean la caja de los gremios. “Los aportes provienen del salario de los trabajadores. En total es un 9%: un 6% por parte del empleador, que va directo a las obras sociales, y otro 3% que pone el trabajador. Con eso se dan las prestaciones de salud a todos los trabajadores en relación de dependencia”, dijo el vocero de la central Jorge Sola en declaraciones radiales.
“El 3% va a un fondo de redistribución, que es lo que erróneamente llaman la caja de las obras sociales, eso es lo que el gobierno le tiene que dar a las obras sociales”, aseveró.
Para los sindicatos, el gobierno incurre en una confusión “no es que el gobierno le tiene que dar a las obras sociales” son fondos de los trabajadores que se redistribuyen para casos de enfermedades de altísimo costo “pero no es dinero del gobierno”.