Tras la jura el viernes pasado como ministro de Modernización, Federico Sturzenegger brindó unas palabras a la prensa y explicó las dos principales tareas de su cartera. “Argentina está un poco sobrecargada de normas y regulaciones y el presidente me ha pedido que avancemos en sacarle el pie de encima a la actividad productiva, es una de las maneras más eficaces de promover la actividad económica, el empleo y el crecimiento”, afirmó el ex presidente del Banco Central. 

Además, agregó: “Hay una segunda agenda que tiene que ver con la transformación del Estado. La Ley Bases le da un año al gobierno para encarar el proceso de reforma. Es importante destacar la famosa frase del presidente ‘no hay plata’. Tenemos que entender que cada peso que gasta el sector público, es un peso que alguien paga, ya sea con impuestos o con el impuesto inflacionario”.

A su vez, el economista anticipó que van a enviar al Congreso la Ley de Hojarasca. “Hemos encontrado un compendio de leyes que han quedado obsoletas y afectan los derechos de propiedad”, explicó. El anuncio ya había sido comentado en reuniones con líderes de bancadas de la oposición dialoguista. El funcionario antes de asumir adelantó sus intenciones de activar rápidamente la agenda de temas que planea sancionar desde el Congreso. El entusiasmo del primer día del ministro choca con el extenso y agotador debate que dejó atrás el parlamento con la Ley Bases.

Al bloque radical llegó un aviso que la denominada “Hojarasca” será un compendio de 100 normas que se van a derogar “con el objetivo de desregular”, muchas de ellas, que estaban en la Ley Bases y quedaron fuera por falta de acuerdo en el tratamiento. Por ejemplo, la ley que regula los precios en la venta de libros o el bloqueo a la importación de azúcar. El Gobierno se vuelve a exponer en una batalla que ya le produjo heridas. En el paquete también puede convivir la eliminación de leyes obsoletas que en general no produce ningún impacto práctico pero que le dan motivos para armar un “relato” al debate de la ley.

En los bloques dialoguistas esperan además, la famosa “ley anti casta” que vaya contra los privilegios de los políticos y la reforma electoral. Esta última, estaría armada y esperan el momento para presentarla. Desde el gobierno adelantaron que buscarán reformar el sistema de las PASO. La reforma electoral ya estuvo en el proyecto ómnibus y volverá a chocar con la negativa radical en mismo tono que en la discusión por el financiamiento. “Lo van a presentar como bajar el gasto de la política, pero la contracara es que las empresas compren las decisiones del Estado, lo cual nos cuesta carísimo”, afirman fuentes parlamentarias que participan de la discusión interna del bloque UCR.

Atentos de antemano, no quieren distracciones con relatos como el de las carreras de palomas que salió a mencionar en los medios el ministro y le muestran los dientes con la letra chica.

Dialoguistas pisan los tiempos

Pasada la Ley Bases, bancadas de los bloques dialoguistas buscan marcar la cancha lo máximo posible. El oficialismo, en alianza con el PRO, ya pidió una sesión para la primera semana de agosto con el objetivo de votar proyectos de ley que mandó Patricia Bullrich al Congreso. Con el receso invernal de las últimas semanas de julio, opositores buscan bajar la intensidad de la actividad parlamentaria, y puntualmente de los proyectos del Ejecutivo.

Esta idea pude chocar con el flamante ministro de Modernización, es posible que intente presentar durante este periodo los proyectos a los que quiere apuntalar en el parlamento. “Nada nuevo va a tener dictamen este mes”, advierten desde el radicalismo.

Según fuentes parlamentarias del bloque Hacemos Coalición Federal que conduce Miguel Ángel Pichetto, la idea es la misma que sus correligionarios. “Esta todo bien con la ley hojarasca y los paquetes para desregularizar pero es tiempo para que Milei gobierne”, sintetizó un diputado a este portal. En la última reunión interna antes de darse las hurras por terminar de una vez por todas con el debate de la Ley Bases, al interior del bloque se juraron planchar la agenda del oficialismo.

“Se discutirán y seguramente se rescatará lo razonable pero el Presidente ya en 6 meses tiene la Ley Bases y el Pacto de Mayo, ahora le toca gobernar”, apuntaron.

Para los dialoguistas, es tiempo que el Congreso tenga su agenda. No hay “entusiasmo” para seguir enredados en mega proyectos grandilocuentes. “Entendemos que si los proyectos vienen habrá empuje para que se trate pero la idea en nuestro bloque es que hasta mediados de agosto no se traten”, dispararon desde HCF.

Sturzenegger dejó correr como versión que ya está dispuesto a enviar los temas a partir de la semana que viene. En los pasillos, el termómetro está frío como el particular invierno que transita el centro del país. “El entusiasmo que tenemos por la ley hojarasca es el mismo que tuve hoy para levantarme a las 6 am con temperatura bajo cero”, bromeó un legislador dialoguista a este portal.