Tras reducir el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidades a la subsecretaría en el inicio de su gestión, el Gobierno nacional ahora decidió disolver por completo el área. 

La titular de la Subsecretaria de Protección contra la Violencia de Género, Claudia Barcia, fue informada de la decisión el miércoles por la noche a través de whatsapp y presentó su renuncia este jueves por la mañana.

“Me dirijo a Uds. a fin de hacerles saber que en el día de ayer he recibido un llamado de whatsapp a las 19:57 hs. Por parte del Secretario de Derechos Humanos Alberto Baños mediante el cual me comunicó que la Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género, que se encuentra bajo la órbita jerárquica de la Secretaría de Justicia del Ministerio de Justicia conforme los decretos n° 450 y 451/24, dejará de existir”, expresó Barcia en la nota y agregó: “En ese sentido, presento mi renuncia indeclinable a partir del día de la fecha”.

Dos semanas atrás el área había pasado de estar bajo la órbita del Ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Pettovello a estar bajo el ala de la cartera de Justicia a cargo de Mariano Cúneo Libarona, por lo que algunas áreas como la Línea 144 y el Programa Acompañar pasarían a Acceso a Justicia.

Claudia Barcia
Claudia Barcia

En tanto, Barcia podría volver a su cargo como fiscal Penal, Contravencional y de Faltas del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ya que cuando le ofrecieron el puesto no renunció sino que pidió licencia y aseguró que cumplirá sus tareas cobrando el sueldo de ese trabajo. 

Este retroceso en materia de prevención de femicidios y la asistencia y acompañamiento a víctimas se da la misma semana que se llevó a cabo la novena marcha Ni Una Menos. 

Además, si bien los recortes en las partidas oficiales por parte del gobierno libertario son generalizadas, un informe elaborado por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) y el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) sobre el presupuesto nacional sostiene que hubo un grave desfinanciamiento en las políticas tendientes a la erradicación de la violencia por razones de género.

“El programa ACOMPAÑAR redujo su ejecución en un 79% y acciones de ayuda urgente para familiares de víctimas de femicidios, transfemicidios y travesticidios no ejecutó presupuesto”, advierte el trabajo. 

Otros programas de protección y rescate de víctimas de violencia y trata registraron caídas del 72,1% y 90%. En cuanto al gasto en infraestructura del cuidado, se advierte que la ejecución es casi nula, mientras que en el gasto en protección social se observan reducciones del 32,2% en Moratorias, del 10% en la Prestación Alimentar y un aumento del 13,5% en las erogaciones asociadas a la Asignación Universal para Protección Social (AUH y AUE).