Control de daños: después de los dichos de Milei contra Villarruel, intentan minimizar el impacto
Tras las críticas del Jefe de Estado a la vicepresidenta, Adorni y Francos minimizaron el comentario, pero no perdieron la oportunidad de chicanear. El portavoz anunció que no habrá pedido de renuncia. “Ella decidió no estar”, aseguró Bertie Benegas Lynch, y dijo que a veces los vices "hacen pelotudeces".
El presidente Javier Milei encendió las alarmas dentro de su propio espacio político con declaraciones que pusieron en el centro de la escena a su compañera de fórmula, Victoria Villarruel. El mandatario aseguró que la vicepresidenta “está más cerca del círculo rojo”, lo que generó rumores de fracturas internas. Sin embargo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, salió al cruce para desactivar cualquier especulación.
“La vicepresidenta es la vicepresidenta, por lo tanto, por supuesto que es parte del Gobierno”, sostuvo Adorni durante la habitual conferencia de prensa. Sus palabras buscaron aclarar la relación entre los líderes de la Casa Rosada, tras el comentario de Milei que insinuaba cierta cercanía de Villarruel con sectores de la “casta política”.
El vocero fue más allá al justificar las palabras del mandatario: “El presidente hizo una descripción y nada más. Es obvio que la Vvcepresidenta está cerca de la casta. Está con varios senadores casta”, declaró, aunque negó que exista una ruptura en el oficialismo. Respecto a un potencial pedido de renuncia, Adorni lo descartó categóricamente: “¿Cómo le vamos a pedir la renuncia? ¡Es una locura! Obvio que no”.
El portavoz también destacó la labor de Villarruel en el Senado, calificándola como “extremadamente compleja” debido a la minoría libertaria en el recinto. Como ejemplo, resaltó la sanción de la Ley Bases, un logro que el oficialismo considera clave en esta etapa inicial de gobierno.
Sobre las ausencias de Villarruel en las reuniones de Gabinete, Adorni justificó que, tras haber coordinado los equipos al comienzo de la gestión, “es razonable que las reuniones sean con los ministros del Ejecutivo”. Según el vocero, esta dinámica no representa “ninguna rareza”.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, también se sumó a las aclaraciones sobre el cruce entre Milei y Villarruel. “Lo que planteó el presidente ayer fue que Victoria Villarruel, como vicepresidenta, es presidenta del Senado. Y su tarea principal es en el Senado donde lidera la Cámara y conversa. Cuando el presidente dice que está más cerca de la casta se refiere a que trabaja fundamentalmente con los distintos bloques de senadores”, explicó.
Francos reconoció que existen “diferencias de opinión y criterios” entre ambos mandatarios, especialmente respecto a la forma en que se tratan algunos temas en el Congreso: “Ha habido desacuerdos, como siempre pasa, no es una cuestión que sea disímil a lo que ha pasado en tantas oportunidades entre el presidente y el vicepresidente. Son roles diferentes”.
Finalmente, el mandamás descartó cualquier tipo de especulación sobre aspiraciones políticas individuales de Villarruel. “Yo no creo que ella hoy esté pensando en algún juego político propio. Yo no puedo juzgar cuál es su intención política porque no la conozco”, aseguró, buscando cerrar el tema.
Este cruce evidencia las tensiones internas en un gobierno que, a menos de un año de gestión, enfrenta desafíos tanto dentro como fuera de sus filas. Por ahora, el oficialismo busca mostrar unidad, aunque las declaraciones del Presidente sugieren grietas que podrían ampliarse con el tiempo.
"Ella decidió no estar”, expresó el diputado Bertie Benegas Lynch en diálogo con Radio La Red y consideró: “Nos podría haber ahorrado esta cuestión de Isabel Perón, si era solo para descolocar a Cristina Kirchner; se solucionaba con un tuit en vez de hacer todo lo de los bustos”.
“Nos ahorra la perplejidad y además la incoherencia de ella, que en 2016 decía que había que incluir a María Estela Martínez en los juicios. El vicepresidente tiene que estar al servicio del presidente, pero a veces parece que están aburridos y empiezan a hacer estupideces”, agregó.
En el Senado, Villarruel lidera la estrategia oficialista en un escenario adverso, con una oposición fortalecida y una agenda legislativa cargada. Su papel será clave para definir la viabilidad del programa de gobierno en los próximos meses. “Las críticas a la vicepresidenta son injustas e innecesarias. A pesar de tener minoría en el Senado está realizando un gran trabajo para avanzar en las ideas de la libertad, que pregonamos durante la campaña”, aseguró el senador Francisco Paoltroni, uno de los eyectados del espacio LLA.