Unos 50 allanamientos en domicilios de Rosario y alrededores eran llevados a cabo esta mañana en el marco de la investigación por las balaceras y amenazas al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, cometidas en los últimos días. 

En total, 46 de los allanamientos se realizaban en los domicilios de familiares de reclusos alojados en la cárcel de Piñero, situados en Rosario y Villa Gobernador Gálvez.

Los procedimientos eran realizados por efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI), a instancias de lo requerido por los fiscales Francisco Carbone, Pablo Socca y Federico Rébola, de la Unidad Especial de Balaceras del Ministerio Público Fiscal (MPF) de Rosario.

Los allanamientos, para los cuales fueron convocados unos 300 hombres de la fuerza santafesina, se realizaban en forma simultánea con el fin de dar con los autores materiales e intelectuales de las balaceras registradas en un cajero automático de una sucursal del banco Macro y en el hospital de Emergencias-HECA- entre martes a la noche y el miércoles.

En ambas balaceras, ejecutadas por presuntos sicarios que se movilizaban en una moto, los atacantes dejaron mensajes amenazantes dirigidos al gobernador Pullaro.

Los hechos, según los investigadores, estarían vinculados al traslado a pabellones de mayor seguridad de los reclusos de alto perfil alojados en la cárcel de Piñero y de otros alojados en distintas comisarías de Rosario y alrededores.

Si bien los resultados de los operativos aún no fueron dados a conocer oficialmente, otras fuentes dijeron a Télam que hay personas demoradas.