La reunión de Gabinete que lideró esta mañana Javier Milei dejó más dudas que certezas sobre el rumbo del Presupuesto 2025. Mientras el mandatario negocia con los gobernadores, en el Congreso fracasó por segunda vez el tratamiento del proyecto Ficha Limpia, en medio de acusaciones cruzadas.

El encuentro comenzó a las 9:30 en el salón Eva Perón de la Casa Rosada, con la participación de figuras clave del equipo: Federico Sturzenegger, Patricia Bullrich, Sandra Pettovello, Gerardo Werthein, Mario Lugones, Luis Caputo, y Mariano Cúneo Libarona. Las únicas ausencias notorias fueron las de Martín Menem, titular de Diputados, y Luis Petri, ministro de Defensa, quien se encuentra de viaje en Israel.

Al término de la reunión, Milei sorprendió con una foto que compartió en redes: sentado con una motosierra sobre la mesa, rodeado de su equipo más cercano. “El mejor Gobierno de la historia. Viva la libertad, carajo”, escribió el Presidente, reforzando su estilo disruptivo que ya es su marca registrada.

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X de Javier Milei

Mientras tanto, en el Congreso, el intento de discutir el proyecto Ficha Limpia volvió a naufragar. Las ausencias de varios legisladores, entre ellos miembros de La Libertad Avanza, generaron tensiones con el PRO y la UCR, que acusaron al oficialismo de pactar con el kirchnerismo para dilatar el debate. Desde Balcarce 50 minimizaron la polémica: “Es un proyecto que se usa para levantar banderas, pero que en realidad no le importa a nadie. Nadie quiere ese proyecto”, aseguran desde el entorno del Presidente.

El clima no es menos tenso en la negociación con los gobernadores, quienes exigen mayor flexibilidad en el Presupuesto 2025. Aunque Milei logró algunos avances individuales con ciertos mandatarios provinciales, la estrategia de estos de emitir un comunicado conjunto criticando la postura del Ejecutivo no cayó bien. “No hay 3.700 millones para sacar de ningún lado”, señalaron fuentes oficiales según trascendió, en referencia a las demandas presupuestarias consideradas “inadmisibles” por el Gobierno.

A pesar de las tensiones, el Ejecutivo aún no definió si incluirá el Presupuesto en las sesiones extraordinarias que planea convocar. El panorama sigue siendo incierto, con la oposición alerta y los gobernadores presionando por más recursos.

En medio de este panorama, el Gobierno se prepara para lo que promete ser un verano agitado en términos políticos, con los números del Presupuesto en el centro de la escena y un Congreso que no parece ofrecer tregua.