"Alianza de listas": la propuesta de los radicales disidentes a Milei para las legislativas 2025
El presidente recibió a parte de la UCR en medio de un escenario político fragmentado. La estrategia suma tensión, con la participación de De Loredo y de los legisladores expulsados de la UCR.
El presidente Javier Milei mantuvo este mediodía una reunión con el bloque de la Unión Cívica Radical (UCR) en la Cámara de Diputados, encabezado por Rodrigo de Loredo. El encuentro, que fue coordinado por Martín Menem, llega en un momento clave para el armado político de cara al 2025, en el que la oposición busca redefinir sus estrategias.
Entre los asistentes estuvieron los diputados Mariano Campero, Luis Picat y Martín Arjol, quienes recientemente fueron expulsados del partido centenario por decisión del tribunal de ética, acusado de “inconductas graves” al apoyar el veto presidencial sobre leyes impulsadas por su propio bloque. Este grupo busca reposicionarse políticamente y se perfila como una posible “puerta” para tender puentes entre la UCR, Juntos por el Cambio y el oficialismo libertario.
En ese sentido, Picat dijo que la posibilidad de una alianza de listas fue mencionada y propulsada. "En mi caso yo fui candidato con Patricia Bullrich, llegamos al Congreso y, desde el primer minuto, los cinco venimos jugando con el Gobierno. Vamos a confluir todos y queremos ser parte de esa fuerza indudablemente porque, en este momento, hay que profundizar este cambio”, aseguró.
"Parte del bloque cree que hay que acompañar al Gobierno. Es una voluntad de cambio que lo sentimos en nuestras provincias. Se discutirá lo que se hará hacia adelante, ya sea la conformación de un interbloque o hacer un apoyo más contundente”, marcó Campero.
“Constructiva reunión y diálogo con el Presidente @JMilei y nuestros diputados. El intercambio de miradas sobre la realidad del país -lo acontecido durante este año y los desafíos que afrontará la Argentina- es un ejercicio sano para nuestras instituciones. Agradecemos su reconocimiento a nuestro aporte en este año parlamentario que pasamos”, manifestó Rodrigo de Loredo, jefe del bloque.
“Muchos serán los temas que nos encontrarán trabajando en el 2025 porque coincidimos en un espíritu reformista de una Argentina que hay que descorporativizar liberando nuestras fuerzas productivas y explotando estratégicamente nuestros recursos para aumentar la riqueza y reducir la pobreza de nuestro país”, agregó.
Por último, sumó: "La baja inflacionaria y la mayor estabilidad económica son un logro innegable. También la desregulación. En la nueva etapa que se habre coincidimos con el presidente en priorizar, entre otras medidas, el régimen de inversiones para pymes, un proyecto elaborado en nuestro bloque y que el gobierno también impulsa".
Por su parte, Carla Carrizo agregó: “No hay solución posible, para ningún problema sin diálogo, ni acuerdos. Lo dijimos desde el inicio de esta nueva gestión, y lo ratificamos hoy. Respondimos la invitación del presidente @JMilei a revisar en conjunto las deudas que nos deja este 2024 y los desafíos que plantea el 2025. El trabajo del bloque UCR ha sido reconocido por propios y ajenos. Somos dialoguistas y creemos en el consenso”.
Los expulsados buscan capitalizar su movimiento
Desde el grupo de diputados sancionados aseguran que su reunión con Milei podría marcar un precedente para futuras alianzas. Comparan su situación con el rol que desempeñó Ernesto Sanz en la fundación de Cambiemos en 2015, aunque con diferencias significativas: esta vez, no habría una convención nacional de por medio.
La estrategia de estos legisladores parece enfocarse en consolidar una relación directa con La Libertad Avanza, que podría abrirles un espacio en el armado electoral del próximo año. Entre sus preocupaciones mencionan la falta de liderazgo en el radicalismo, destacando la figura de Milei como una “amenaza política” incluso en provincias tradicionalmente radicales como Corrientes.
El tribunal de ética de la UCR justificó las expulsiones de los legisladores al considerar que violaron el artículo 53 de la carta orgánica del partido. Sin embargo, la medida aún debe ser ratificada por la Convención Nacional, que no tiene fecha definida para su reunión. Mientras tanto, las afiliaciones de los diputados han sido suspendidas de forma preventiva.
El conflicto expone una creciente fractura dentro de la UCR, que deberá definir si opta por una “libertad de acción” en cada provincia o establece una estrategia unificada para el 2025.