Las travesuras de Jerry, las conexiones de Uliarte y una imagen que puede cambiar el rumbo de la investigación

Gerardo Milman se transformó en la “mancha venenosa”. Nadie quiere tenerlo cerca, ni recibir sus llamados. Su jefa política está muy contrariada con las últimas revelaciones que colocaron a uno de sus principales alfiles, en el centro de los cuestionamientos judiciales y políticos. “A Patricia (Bullrich) no le gusta nada que aparezca vinculado al atentado contra Cristina Kirchner, pero mucho menos le gustan sus comportamientos desprolijos”, le confió a Data Clave un asesor del bloque de diputados de Juntos por el Cambio que tiene acceso al despacho de la titular del PRO. 

De hecho el miércoles pasado, no estuvo presente en la sesión donde los integrantes de la Cámara baja dieron media sanción a la ley de “alcohol cero” al volante, despertando más de una suspicacia. “Es insostenible su conducta, está muy descontrolado”, explicó la fuente que pidió no ser identificada. Es que su propensión a contratar personal femenino para las tareas de despacho que no cumplen horarios regulares y cuyos antecedentes laborales poca relación guardan con la actividad desplegada en el Congreso, es tema de conversación en todos los corrillos del palacio legislativo.

La gota que desbordó el vaso la aportó una investigación de este portal, que el domingo pasado reveló un episodio ocurrido en la madrugada del 4 abril pasado, cuando María Luz Lanusse Peralta Ramos se encontraba circulando con un rodado marca Peugeot modelo 2008 Sport 1.6 (dominio AF-068-CS) y fue detenida en la intersección de Bullrich y Cerviño de la ciudad de Buenos Aires por personal de tránsito del gobierno porteño quien, al advertir que tenía una licencia de conducir apócrifa, dispuso el secuestro del vehículo.

De acuerdo a las actuaciones judiciales a las que accedió este portal, minutos después de este secuestro, “Milman se hizo presente en el lugar del control manifestando ser titular del vehículo (a pesar que el dominio se encuentra registrado a nombre de la Metalúrgica Oliva Hnos. S.A. siendo él el único autorizado a circular con cédula azul)” y luego de chapear con su condición de “diputado nacional”, se quejó ostensiblemente por el accionar del personal policial y el fiscal interviniente en supuesto perjuicio de la que el mismo Milman refirió como “su mujer”.

No conforme con la queja efectuada en el lugar de los hechos, tras retirarse ofuscado Milman presentó una denuncia ante la justicia penal nacional en la que acusó al Secretario de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N° 4 por los "delitos de hurto agravado y el de abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público".

Como era de suponer, el fiscal César Augusto Troncoso en su dictamen del 12 de abril de 2022, solicitó que se desestime la denuncia del diputado, al considerar que “no corresponde encuadrar dicho suceso en el delito mencionado ni en ningún agravante, toda vez que no ha existido ningún desapoderamiento ni apoderamiento de modo ilegítimo del vehículo”.

Al respecto, el representante del ministerio público sostuvo que “el secuestro fue efectuado siguiendo un criterio para determinar el objeto del hecho a investigar que fuera materia de la consulta” ya que quien conducía el automóvil “no tenía en su poder registro de conducir válido, presentando en su lugar uno apócrifo y sin la debida autorización para tener ese rodado en su poder” ya que "ni siquiera se encontraba autorizada a conducir el rodado, ni tampoco contaba con la cédula verde del vehículo”.

Pero lo más contundente del dictamen es la sugerencia final que plantea el poder judicial al referirse a la actitud de “Jerry” Milman. “Llama la atención la conducta desplegada por el aquí denunciante quien, lejos de adoptar una conducta centrada y ajustada al ordenamiento vigente, desde el punto de vista de la moral y ética que debe tener cualquier funcionario, en este caso un Diputado de la Nación, se mostró ofuscado y cuestionó el accionar policial, situación que lo llevó a denunciar hechos que ni siquiera constituyen delitos de acción pública”. 

Antes de desestimar categóricamente la denuncia por “inexistencia de delito”, el fiscal consideró prudente “notificar a la Honorable Cámara de Diputados de la Nación Argentina acerca de la actitud asumida por el mencionado Milman a los fines disciplinarios que estime corresponda”.

El pedido judicial para que la Cámara de Diputados estudie posibles sanciones contra el legislador bullrichista llego al Congreso el 29 de abril. Pero, al parecer, “se traspapeló” hasta que Data Clave expuso el caso ante la opinión pública y promovió el interés de varios integrantes del bloque “frentetodista”, donde se definió que el requrimiento del fiscal sea tratado en la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento para debatir ahí las implicancias del accionar de Milman y las posibles sanciones que pueden considerarse en el parlamento. "Va a ir por esa comisión", aseguró un diputado que sigue de cerca la cuestión en el oficialismo.

Una de las primeras opciones que se barajaron en el Frente de Todos fue que "no convenía avanzar" con la discusión planteada por el fiscal para no generar un clima adverso en un Congreso cada vez más caliente y con más clima electoral. La vicepresidenta no coincidió con esa postura y pidió a los legisladores que avancen con el tema “hasta las últimas consecuencias”. 

Los caminos de Brenda

Brenda Uliarte apareció por primera vez en televisión el 14 de agosto de 2022. Quince días después sería una de las ejecutoras del intento de magnicidio contra la vicepresidenta, pero ese día era supuestamente tomada por sorpresa por un movilero del canal Crónica vendiendo copos de azúcar en la vía pública, a la altura del 1500 de la avenida Corrientes. El cronista le preguntó su opinión sobre los planes sociales, y Brenda, quien dijo llamarse Ámbar, sostuvo que ella había sido beneficiaria de un plan social, que había renunciado al mismo porque "prefería ganarse el dinero trabajando" y que idéntico monto al del plan lo ganaba en tres días vendiendo copos.

Todo mentira. No se llamaba Ámbar, jamás había recibido un plan social y nunca vendió un solo copo de azúcar. Estaba acompañada por quien también aparentaba estar allí espontáneamente: Fernando Sabag Montiel. Él había tenido otra aparición en el mismo canal, diez días antes. Fue el 3 de agosto, el mismo día que un grupo de mujeres integrantes de Equipo Republicano, algunos miembros de Revolución Federal, y dos o tres del grupo nazi platense Kyle Rittenhouse, escracharon a Sergio Massa en la puerta del ministerio de Economía el día de su asunción.

Justamente esa misma tarde Sabag Montiel, junto a Brenda y Sergio Orozco también fueron interceptados “casualmente” por un movilero del canal Crónica, a la salida de un cine en Tigre. Curioso es que fueran al cine en Tigre, cuando vivían en San Martín y "paraban" en Barracas. En esa ocasión Sabag Montiel opinó acerca de la salida de Batakis y la proyección de Massa como ministro y Brenda se mantuvo en segundo plano.

La intervención de Brenda del 14 de agosto se instaló como la "contracara" de la “planera”, tal como se apodó a Mariana Alfonzo, posible actriz que tuvo enorme difusión mediática cuando en el mes de julio -y también por Crónica- dijo que ella no pensaba trabajar porque le convenía cobrar planes sociales. Por entonces, y siempre en Crónica TV, la supuesta “planera” tuvo un fogoso debate con una joven de pelo teñido en dos colores, una estrella ascendente como influencer de derecha en las redes sociales: Delfina Meza, o Delfina Wagner, tal su nombre artístico en homenaje al compositor musical que inspiró a Adolf Hitler con su obra. 

Delfina -quien no oculta su admiración por la simbología nazi, se toma fotos con Biondini o comparte charlas y esparcimiento con los integrantes del autoproclamado “Ministerio del Odio”, firmó contrato con Crónica el 26 de junio y el el 4 de julio se incorporó al staff del programa de la tarde del canal, justo el día que asumió Silvina Batakis como ministra de Hacienda y debió suspenderse la conferencia de prensa por la irrupción en la escena de algunos miembros de Revolución Federal: Cristina Romero, Sabrina Basile, Ernesto Anzoátegui y Leonardo Sosa. 

El ingreso de Delfina al canal coincide con la difusión de Alfonzo como orgullosa planera, y su contrafigura posterior, Uliarte, como ex planera que elije trabajar dignamente. Para entonces, Delfina y Brenda coincidían en otros espacios, al menos socialmente. La mujer de pelo de dos colores tiene fotos en redes sociales con integrantes del grupo discursivo violento como Martín “El Negro” Almeida yendo juntos de vacaciones, sube a sus redes charlas por zoom con Eduardo Prestofelippo, alias El Presto, mientras este mantenía un romance con Uliarte.

Cuando el 14 de agosto Brenda aparece casualmente interceptada por el móvil de Crónica, al menos uno de la cartera de “odiosos”, sabía quien era: El Presto. Pero otro de los miembros del grupo apodado Danann, quedó impresionado por la actitud de Uliarte (a quien, supuestamente, no conocía) a punto tal que posteó, el mismo 14 de agosto y luego de verla tres minutos en TV, “Condecoren ya a la vendedora de copitos”. 

Raro imaginar a Danann mirando Crónica TV a las ocho de la noche y posteando loas acerca de una ignota entrevistada callejera quien terminó siendo amante de su amigo. Coincidencias. La misma impresión, esa noche estelar, causó Brenda en la diputada provincial por Formosa Gabriela Neme, quien también vio a la vendedora de copitos por la tele, automáticamente hizo una captura de pantalla de la entrevistada y la subió a las redes con este comentario: "¡Con personas así vamos a levantar la patria! ¡Vamos, Argentina, que cada día somos más los que entendemos que el camino es laburar! ¡Es por allí!". Unos pocos días después, Neme estuvo de visita en la casa de Ximena de Tezanos Pinto, justo arriba del departamento de la vicepresidenta. 

Mientras eso pasaba en Formosa, en el conurbano profundo una integrante de Equipo Republicano llamada Jenny del Valle Vera, que participó de las marchas de ese grupo y también de los encuentros y escraches antivacunas, también capturó pantalla y posteó: "Si quieren ser verdaderas mujeres empoderadas, vayan a laburar". 

El 18 de agosto, cuatro días después de esa entrevista callejera, Uliarte visitó el piso de Crónica TV para debatir mano a mano con Mariana, la planera, en el programa en el que participa la falsa Wagner. A nadie se le ocurrió preguntarse hasta ahora como supo la producción quién era esa chica y cómo ubicarla para invitarla al programa. Ese mismo 18 de agosto por la noche, Brenda asistió a la marcha de las antorchas que organizó Revolución Federal. Se la ve en fotos y videos, y ella misma lo comentó en chats con su amiga -luego procesada y detenida- Agustina Díaz. 

En esa manifestación en la que expusieron la guillotina y arrojaron teas ardientes contra la Casa de Gobierno, pueden verse coincidir en un mismo modo, tiempo y espacio a los integrantes más reconocibles de Revolución Federal: Jonathan Morel, Leonardo Sosa, Sabrina Basile, Daiana López y su esposo, el abogado de la organización, Nilo Medina. Pero también a algunos representantes de Equipo Republicano como Ernesto Anzoátegui y Cristina Luján Romero -la llamada "amiga de fierro" de la vecina de Cristina- y a Hernán Carrol, de la agrupación Nueva Centro Derecha y a quien, cuando el intento de crimen pasó y algunos terminaron presos, Sabag Montiel reclamó por un abogado.

Según un peritaje de geolocalización que consta en la causa, Carrol,  Uliarte y Sabag Montiel coincidieron en un mismo tiempo y lugar los días 1, 16, 20 y 22 de agosto; por lo que estuvieron juntos antes, durante y después de que Brenda y Fernando aparezcan en Crónica TV. Otra mentira de Carrol quien, cuando se hizo público el reclamo por un abogado que hizo Sabag Montiel desde la prisión, se sentó en el estudio de C5N y declaró ante el periodista Pablo Duggan que él también, como todos los demás, vió por primera vez a Brenda en esa entrevista callejera. 

El 20 de agosto Carrol invitó a Brenda a la fiesta de cumpleaños de Almeida, quien asistió acompañada por Sabag Montiel, estuvo veinte minutos, durante los cuales le dio su número de teléfono a Almeida quien - según consta en la causa- la noche del intento de magnicidio, le mandó un mensaje diciendo: "¿Se pudrió?". 

Otro curioso entrecruzamiento involucra a Carrol y Nicolás Carrizo, el otro copito. El 4 de agosto, cuando Carrol supuestamente no conocía a ninguno de estos lúmpenes, recibió una llamada que salió del domicilio de Barracas donde Carrizo fabricaba los copos.

Las coincidencias continúan y en este ballet en donde todos se cruzan pero nadie se conoce, desde el 23 de agosto -día del alegato del fiscal Luciani- hasta el 1 de septiembre, por la esquina de Juncal y Uruguay, en la calle y por la casa de la vecina, pasaron la diputada Gabriela Neme -quien zapateó figuradamente sobre la cabeza de Cristina-; la abogada de Revolución Federal Gladis Egui, quien alquila un cuarto en la casa de Tezanos Pinto; Leonardo Sosa y Nataniel Reinstein Menin, de Revolución Federal, detenidos la noche del 23 en esa esquina cuando arrojaron bombas molotov contra militantes kichneristas; Ernesto Anzoátegui, que se filmó al lado de Juan Grabois durante la represión policial del 28 de agosto en esa zona; Cristina Luján Romero, de Equipo Republicano también visitó a la vecina durante varios de esos días; y por último, la tríada de copitos -aunque pueden ser más- Uliarte, Carrizo y Sabag Montiel que montaron guardia e hicieron inteligencia durante toda la semana comprendida entre el 23 de agosto y el 1 de septiembre. 

Pero los cruzamientos siguieron después del fallido atentado: Gastón Guerra siguió yendo a lo de la vecina y filmando el interior y el exterior del edificio, con el argumento de estar haciendo arreglos en la casa de la vecina. Y hace escasos quince días, estuvieron de fiesta en lo de Tezanos Pinto Almeida y Wagner, tal como la misma Ximena mostró por TikTok.

Una imagen vale más que mil palabras

Desde que Cristina Kirchner se constituyó como querellante en las causas que investigan, por un lado, el atentado en su contra (que tramita en el juzgado federal de María Eugenia Capuchetti) y, por el otro, las actividades violentas de Revolución Federal (en el despacho de Marcelo Martínez de Giorgi), se viene reclamando con insistencia la unificación de ambos expedientes por considerar que “contienen elementos comunes que podrían servir para acelerar el esclarecimiento”, tal como planteó oportunamente el doctor José Manuel Ubeira, a cargo de la querella.

A pesar de los reiterados pedidos, rechazados por Capuchetti, con el aval de la Cámara Federal porteña, el trámite sigue en el Federal 5, que viene demorando algunas pesquisas tales como la profundización de la pista Milman y del entramado de relaciones entre los llamados “copitos” y los “odiadores seriales” con ministerio propio. 

Pero esta semana apareció un elemento nuevo que -de ser constatado fehacientemente- podría concluir con la inevitable conexidad de ambos procesos. Una minuciosa visualización de los videos disponibles donde quedó registrado el momento del intento de magnicidio realizado por la periodista Ivy Cángaro, permitió establecer que, a pocos centímetros de la vicepresidenta y de manera simultánea a la aparición de Sabag Montiel con su pistola, aparece un hombre cuyos facciones coinciden con las del abogado de Morel, Nilo Medina.

El material fue aportado a la querella que se encuentra cotejando el resultado del monitoreo con otras imágenes antes de presentarlo en el juzgado. Efectivamente si esto se comprueba, quedaría demostrado que los integrantes de Revolución Federal no fueron ajenos a la planificación del ataque. ”Recordemos que Medina, además, se grabó efectuando tareas de inteligencia previas al atentado", apuntó la colega.

Colaboró en esta investigación: Ivy Cángaro