La pandemia del coronavirus trastocó los planes de todos los argentinos y argentinas, pero en especial afectó a aquellos que están en la primera línea de batalla: los profesionales de la Salud. En este sentido, a lo largo de este año y medio de pandemia, el sacrificio de los trabajadores del sector sanitario ha sido total y el cansancio y desgaste es incalculable. 

Al respecto, días atrás explotó un conflicto laboral en el corazón de la provincia de Buenos Aires, puntualmente en el Municipio de Tandil. Allí, el lunes inició la medida de fuerza en todo el Sistema Integrado de Salud Pública, manteniendo las guardias y servicios de emergencia esenciales. Reclaman la inclusión de todos los empleados en la reducción horaria de 6 horas diarias o 36 semanales, como así también la bonificación del 25 por ciento.

Tras un intento fallido de mediación por parte del Ministerio de Trabajo, el paro continúa.
Durante el encuentro, del que participaron los trabajadores del Sistema Integrado de Salud Pública, el Sindicato de Trabajadores Municipales y autoridades del Ejecutivo. En la reunión, ninguna de las partes solicitó la conciliación obligatoria, por lo que la situación está empantanada.

Finalizada la cumbre, desde el gremio ratificaron su posición y alentaron a tener mayor presencia en las movilizaciones y no descartan “endurecer las medidas a adoptar en el futuro".

En tanto, Gastón Morando, presidente del Sistema Integrado de Salud Pública, fue categórico al manifestar que "si levantan el paro seguimos conversando". Desde el Ministerio de Trabajo, el titular de la delegación local, Ezequiel González Godoy, indicó que "van a seguir en contacto las partes para ver si llegan a acuerdos y nosotros vamos a monitorear".

La particularidad en el municipio bonaerense es que el intendente Miguel Lunghi es médico, por lo que conoce de primera mano la situación y tiene una mirada particular al respecto. “Todos los empleados de Salud quieren trabajar 6 horas cobrando 8. En lugares críticos como terapia intensiva y terapia intermedia, que hace rato ya trabajan 6 horas. Y le ofrecimos por nuestra cuenta a la guardia que trabaje 6 horas en lugar de 8”, apuntó el alcalde en diálogo con Data Clave. Y aclaró: “El resto, administración, mantenimiento, las salas generales, no aceptamos que trabajen 6 horas bajo ningún punto de vista”.

En la misma sintonía, el jefe comunal disparó: “ellos están encaprichados en trabajar 6 horas en lugar de 8, igual que en los centros de Salud que están en los barrios, que prácticamente es más prevención, controles de gripe, o diarrea, que después te derivan al hospital. Al contrario, mi política es que en los centros de Salud de los barrios estén mucho más horas, así la gente no tiene que ir al hospital, y que las emergencias puedan atenderse en el barrio”. 

Respecto de la problemática que se reclama, Lunghi fue tajante: “No podemos nombrar 71 personas nuevas, porque al trabajar 6 horas se me cae un turno. Además, nombrar 71 personas de golpe me genera un aumento presupuestario muy importante que no está calculado este año y menos en tiempos de pandemia. No lo podemos decretar, está fuera de todo razonamiento”.

Y sentenció: “No tiene ninguna razonabilidad el pedido que están haciendo, están muy duros. Bueno, perfecto, yo no voy a cambiar mi opinión. Los que tienen que trabajar 8 horas tienen que hacerlo, ellos eligieron la profesión. No tengo otra, no puedo darle 6 horas. Tampoco puedo nombrar 71 personas nuevas en el hospital, es una brutalidad, cuando todo el mundo está pidiendo que bajemos las tasas”.