El ministro de Economía, Luis Caputo, dijo a mediados de julio que “ya empieza a haber signos de recuperación” y algo de eso ocurrió en mayo cuando el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) registró en mayo una suba interanual del 2,3%, y subió 1,3% en relación a mayo.

Sin embargo, esta suba respecto al 2023, la primera luego de seis meses de caídas consecutivas, se vio apalancada porque el sector agropecuario mostró el doble de actividad que el año pasado, cuando estuvo seriamente afectada por la sequía, y un alza del 7,6% en el sector de minería.

El economista del IERAL, Jorge Vasconselos explicó que la suba se debe a que “estamos comparando con el año pasado, que hubo una sequía muy fuerte, entonces toda la agroindustria está recuperando ese terreno perdido”.

“La novedad fue que en mayo (la actividad económica) subió 1,3% respecto de abril, una mejora que fue menos esperada y más significativa”, afirmó Vasconcelos, en declaraciones al programa “Es por acá” de Radio Millenium.

El economista del IERAL destacó que los indicadores de consumo “vienen mejorando muy despacio”, debido a que “hay una mejora de poder adquisitivo en la parte formal de la economía. Los salarios privados están recuperándose a un ritmo del 7% mensual contra una inflación de más de 4%, también, luego luego del pozo profundo del primer trimestre. Algo similar está ocurriendo con jubilaciones y con planes sociales”.

“El piso de la recesión puede haber estado entre marzo y abril, pero de ningún modo la recuperación está garantizada” y eso se debe “a la baja actividad de la industria, el comercio y la construcción, que son los sectores más importantes en términos de empleo. Por esa razón es que uno puede ver un piso de la recesión, pero no una recuperación rápida”, dijo Vasconselos.

En la misma línea, Luciano Cohan, ex Subsecretario de Programación Macroeconómica, destacó: “Mayo se está comparando contra un mayo horrendo en 2023, cuando pegó la seca. Ojo porque es muy probable que el interanual vuelva a dar negativo en los próximos tres meses”.

X de Luciano Cohan

Para junio lo datos no son alentadores. Las Pymes industriales registraron una caída interanual del 20,4% según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), pero también una merma del 3,1% en relación a mayo.

La producción de cemento alcanzó en junio a 727.405 toneladas lo que representó una merma del 32,8% respecto del mismo mes del año pasado, pero también un retroceso del 7,4% en relación a mayo.

Como ocurrió en el sector automotriz, la concurrencia de dos feriados largos en la tercera semana del sexto mes, hizo que solo hubiera dos días laborales, lo que agravó la caída de la producción de cemento que ya lleva 15 meses consecutivos de caídas interanuales.

En tanto, la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) dio cuenta que durante el sexto mes del año, la producción alcanzó las 32.029 unidades, lo que implicó una baja del 40,2% con relación a igual mes del año pasado, pero también del 16,7% respecto de mayo.