En los seis primeros meses del año el intercambio comercial de Argentina dejó un superávit de US$ 1.708 millones que revistió el déficit de US$ 4.403 millones de enero-junio del año pasado, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Sin embargo, si los precios hubieran sido los mismos que en el primer semestre del 2023, el superávit habría sido de US$ 12.462 millones debido al mayor descenso de los precios de las exportaciones, -7,7%, en comparación con los valores de las importaciones -4,9%. De esta manera, el país registró una pérdida en los términos del intercambio de US$ 1.198 millones, destacó el Indec.

Al resultado del semestre se arribó luego de que el intercambio dejara un superávit de US$ 1.911 millones, resultado que revirtió el déficit de 1.833 millones del sexto mes del año pasado.

Esto se debió a que durante junio la facturación por las ventas al exterior aumentó 21,7% respecto a igual mes de 2023, unos US$ 1.175 millones, debido al incremento del 30% en las cantidades vendidas con precios que estuvieron 6,6% más bajos que los del año pasado. Y a este aumento en las exportaciones se le contrapuso una caída del 35,4% en la facturación de las importaciones, con mermas en todos los usos económicos debido a la retracción de la actividad económica, y la menor necesidad de importar combustible.

En junio, las compras al exterior sumaron US$ 4.679 millones, unos US$ 2.569 que, en igual mes del 2023 con precios casi similares, apenas bajaron 1,7%, pero con una merma del 34,5% en las cantidades.

Habrá que recordar que en la tercera semana de junio hubo solo dos días hábiles laborables, debido a dos fines de semana “largos”, y eso se tradujo en la inactividad de todo el sector automotriz, uno de los principales demandantes de insumos del exterior.

En el sector automotriz el intercambio entre exportaciones e importaciones dejó un saldo negativo de US$ 82 millones, mientras que en junio de 2023 habían registrado un déficit de US$ 500 millones.

En cuanto al segmento de combustibles, el intercambio dejó un déficit de US$ 233 millones, casi un tercio de los US$ 685 millones de pérdida del año pasado.

En tanto, el sector sojero, el principal bien de exportación del país, registró un superávit de US$ 1.978 millones, unos US$ 1.473 millones superior al mismo período del año anterior debido a la recomposición de las exportaciones frente a un 2023 signado por la sequía.