Luego de pasar toda la noche acampando en Plaza de Mayo y en zonas cercanas al Obelisco, las organizaciones sociales levantaron la medida de fuerza, pese a que el Gobierno Nacional no los recibirá para discutir refuerzos en los planes.

Los militantes de organizaciones de izquierda, alineados en la Unidad Piquetera (UP), decidieron levantar las carpas en la Ciudad de Buenos Aires y frenar el acampe que iniciaron en la tarde del miércoles y que extendieron hasta esta mañana.

En concreto, lo que plantean desde los movimientos sociales opositores es que haya un bono para todas las personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad, en el marco de la crisis económica actual.

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El referente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, fue uno de los que dialogó esta mañana con la prensa y cruzó a varios integrantes del Gobierno, aunque finalmente confirmó que no lograron ser recibidos por ninguna autoridad.

"Pedimos un bono de emergencia, un IFE para todo ese universo que tuvo el cobro de $20 mil. Estamos pidiendo ahora que sea de $20 mil. El Gobierno lo implementó en mayo y junio y ahora no lo tiene en carpeta a pesar del agravamiento de la situación social", remarcó el dirigente en declaraciones a la TV Pública.

Al ser consultado sobre cómo pasaron la noche, Belliboni contó que fue "muy fría", pero que trataron de que "no haya ningún chico" en el acampe. Los manifestantes montaron algunas carpas sobre la superficie la histórica plaza ubicada frente a la Casa Rosada y prendieron pequeñas fogatas para mitigar la baja temperatura.

Belliboni confirmó públicamente que la decisión de levantar la medida fue por mayoría "no absoluta" y que muchos movimientos querían continuar con el acampe. En tanto, definió que todas las columnas marcharán el 22 de agosto, cuando se reunirá el Consejo del Salario para definir si se reabrirán paritarias.