Infranqueable. Así fue la postura de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en las varias veces que debió hacer un alto en su discurso por los cantos de los militantes reclamando y entonando el “Cristina Presidenta” o el nuevo hit kirchnerista remasterizado: “una más y no jodemos más”.

La ex presidenta no soltó prenda y no hizo ninguna señal sobre su rol. Tampoco dio pistas de posibles sucesores a dedo como en 2019. El mensaje fue claro y hacia el interior de la unidad frentedetodista. “Una sola persona no puede”, fue la sentencia que esbozó. 

“Tiene que haber cuadros que tomen la posta y lleven adelante el programa de gobierno que necesita la Argentina. Necesitamos tres o cuatro ejes sobre los que desarrollar es programa”, dijo CFK.

El primero de esos ejes que mencionó la vicepresidenta y líder de un sector en el oficialismo es lograr que el FMI “deje de lado” el programa que impone a todos sus deudores y nos permita “elaborar un programa propio” de crecimiento. “Va a ser imposible pagarlo por más que digan lo que digan”, aseguró. 

Sin embargo, una foto fue la más elegida por la usina de prensa de la vicepresidenta y deja al menos, una señal de los que están mejor parados en el clamor kirchnerista. Junto a la “jefa”, además de Máximo Kirchner y sus dos nietos, estuvieron en un privilegiado primer plano Axel Kicillof, Sergio Massa y Eduardo “Wado” de Pedro.

“Cristina subió a Instagram 10 fotos, o casualidad en 2 se ve a Wado. Las otras son con la gente y con Máximo y nietos. Con políticos solo Wado”, dijeron a Data Clave desde el riñón del mercedino. Tanto el ministro del Interior como el ministro de Economía tuvieron un lugar de privilegio.

La foto de estos dos últimos con Cristina Kirchner al frente fue una de las que más se difundió. Lejos de alejar rumores, la expectativa seguirá creciendo en el oficialismo. ¿Una señal de posible fórmula compuesta por alguno de los destacados? El río suena…