Sin Bolsonaro y con Uruguay mirando hacia China, se reúne un dañado Mercosur
Será el jueves a las afueras de Asunción y Fernández intentará que Lacalle Puo no cierre un tratado de libre comercio con Beijing por afuera del bloque regional.
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou anunció el miércoles pasado que iniciaran las negociaciones para cerrar un Tratado de Libre Comercio su país y China, una iniciativa diplomática que viola las normas y el espíritu institucional del Mercosur.
A su vez, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ya adelantó que no concurrirá a la Cumbre de Presidentes que se realizará en la ciudad de Luque, próxima a Asunción, debido a la falta de avances en la rebaja del Arancel Externo Común (AEC).
Esta crisis en el Mercosur se arrastra desde marzo del 2021, cuando en la celebración de los 30 años de creación del bloque, el presidente Alberto Fernández, y su par, Lacalle Pou, intercambiaron críticas sobre la apertura económica.
Lacalle Pou dijo en esa oportunidad que el Mercosur, pero no puede ser “un lastre” que actúe como un “corset” que no deja mover a los países: “Uruguay necesita avanzar“.
Frente a estas declaraciones, Fernández salió al cruce y le dijo que: “Una carga es algo que hace que a uno lo tiren de un barco y lo más fácil es bajarse del barco si la carga pesa mucho”.
Más allá de ese entredicho, y algunas reuniones personales posteriores, Uruguay siguió sus negociaciones y ahora apunta a cerrar un Tratado de Libre Comercio con China, su principal socio comercial.
Si bien el Mercosur establece que cualquier decisión de este tipo tiene que reunir la aprobación de las otras tres naciones, desde Montevideo apuntan a que esa disposición “es indicativa”, y que nunca fue aprobada por el Parlamento Uruguayo.
Mientras tanto, Brasil sigue con su empeño de que se bajen aún más el AEC y que Argentina cese con la aplicación de licencias no automáticas para las importaciones dentro del bloque.
Bolsanaro y Fernández nunca tuvieron una reunión bilateral “cara a cara” y no es secreto el apoyo del Gobierno argentino para que Luiz “Lula” da Silva regrese al Palacio de Planalto.
El viernes, un día después de anunciar que no iría a la cumbre, Bolsonaro afirmó que si continúa la crisis económica en Argentina obligará a Brasil a crear una nueva “Operación Acogida” para recibir inmigrantes, comparando así con la que tuvo que hacer el gobierno brasileño en 2018 en el estado de Roraima para recibir a los venezolanos.
“Miren hacia dónde va la economía argentina. ¿Tendremos que hacer pronto una ‘Operación Acogida´ para Argentina ? La mitad de la población ya está en el umbral de la pobreza. El segundo país más rico aquí en Sudamérica, nuestro gran socio comercial todavía”, dijo Bolsonaro durante un acto de campaña.
En este clima, tampoco se espera que participe en su carácter de país asociado el presidente de Chile, Gabriel Boric quien enviará a su canciller Antonia Urrejola Noguera.