Semana con posible doble sesión en Diputados: agenda cruzada entre oficialismo y oposición
La sesión por la reforma electoral que impulsan bloques opositores cuenta con los apoyos necesarios para habilitar el tratamiento. El Frente de Todos no ayudará con el quórum y analiza convocar al día siguiente con agenda propia. Un recinto, dos sesiones y dos agendas.
Los bloques de la oposición Cámara de Diputados, con Juntos por el Cambio, Interbloque Federal, Juntos Somos Río Negro y los liberales, convocaron a sesionar esta semana para votar el proyecto Boleta Única de Papel. Se trata de una iniciativa elaborada entre todos los proyectos presentados. Como adelantó Data Clave, la cita será el próximo miércoles 8 de junio, a las 10 horas.
“Ellos convocan, ellos juntan quórum”, repiten en el oficialismo. Los diputados del Frente de Todos no bajarán al recinto hasta tanto no esté habilitada la sesión por parte de los legisladores que buscan aprobar la Boleta Única. La oposición tendrá que encargarse de conseguir los 129 diputados que se requieren para que comience un debate en el recinto.
“Esta tarde se decide si pedimos sesión especial para el jueves, con un temario de temas dictaminados”, afirmó a Data Clave una fuente parlamentaria del Frente de Todos. Era viernes, el día en el que se suele resolver la agenda de la semana siguiente. La convocatoria no apareció aún pero según le cuentan a este portal, “la posibilidad sigue latente” y la idea es que entre el proyecto de alivio fiscal que modifica las escalas en el monotributo junto “al resto de la agenda del oficialismo”.
Para tal motivo, la comisión de Presupuesto y Hacienda convocó a una reunión el martes a las 15.30 para dictaminar el proyecto del Ejecutivo que busca un puente de inclusión para los pequeños contribuyentes. En sintonía, el Frente de Todos quiere incorporar al debate el proyecto de Sergio Massa y Leandro Santoro que busca adelantar la actualización de las categorías del Monotributo antes del 1 de julio con índice similar al de las jubilaciones. Esa iniciativa tiene las firmas de los opositores Alejandro “Topo” Rodriguez (Interbloque Federal) y Margarita Stolbizer (JxC).
Si el debate en comisión avanza y se logra firmar un dictamen, la convocatoria del oficialismo podría ser un hecho para el jueves, un día después del debate por Boleta Única. Una semana poco común con dos sesiones y dos agendas.
Boleta Única
La oposición sabe que no necesita buscar acuerdos con el oficialismo para tener el quórum en la sesión que pidió por Boleta Única de Papel. Con revalidar el acuerdo alcanzado hace unas semanas, tendrá el mínimo de 129 diputados para aprobar el proyecto de ley que busca darle un nuevo instrumento a las elecciones nacionales. En la votación que emplazó el debate en comisiones, los bloques opositores lograron 132 votos.
El dictamen de la oposición establece que haya cinco candidatos por partido con nombre y apellido en cada boleta. Esto significa que habrá una mayoría de las provincias en las que prácticamente van a figurar todos los que participen como candidatos a legisladores. En 20 de las 24 provincias, la totalidad de los candidatos a diputados o senadores estarán de manera completa con sus nombres en la boleta. Los distritos más grandes como Provincia de Buenos Aires, Córdoba o Ciudad Autónoma tendrán a los primeros.
En el caso de la imagen, el dictamen indica que serán dos fotos por cada lista, los dos primeros garantizando una presencia femenina. Es decir, la fórmula presidencial completa y dos por cada categoría alternando hombre y mujer. La otra de las particularidades que se discutió hasta último momento es la del voto en blanco. La decisión es que no va a tener la opción de voto en blanco. Esta posibilidad algunos entendieron que dejaba a aquellos partidos que no tienen fiscales la posibilidad que rellenen el casillero en el recuento y pudiera alterar algún voto.
Además, habrá un ítem para votar lista completa sin la necesidad de marcar cada una de las categorías. Algo que podría ayudar al arrastre de los partidos grandes. Por último, se restituye el voto por correo para residentes en el exterior, algo que había instrumentado Mauricio Macri por decreto y que Alberto Fernández derogó.