La alianza entre el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, gana fuerza. Y en la próximas horas materializarán un armado en la provincia de Buenos Aires que podría tener su réplica en otras provincias y municipios y que, también, deja abierta la posibilidad de se que tenga su propio impacto en el Congreso de la Nación.

La Libertad Avanza y el PRO que responde a la funcionaria nacional unirán fuerzas en la Cámara baja de la Legislatura bonaerense a través de un bloque en el que confluirán los representantes de ambos sectores y que, además, tiene casi todo dado para sumar otras dos bancas más y con ese agregado convertirse en la primera minoría del recinto.

Según pudo saber Data Clave, las negociaciones “están muy avanzadas” y solo falta concretar algunos acuerdos puntuales hacia adentro para cerrar un movimiento que, en concreto, sentaría las bases de lo que sería una alianza política de cara a dar la pelea bonaerense en 2025.  

De esta manera, el bloque de LLA, liderado por Agustín Romo desde hace menos de una semana, tras el salto de Nahuel Sotelo a la Secretaría de Culto, se fusionará con PRO-Libertad, que es comandado por Florencia Retamoso, principal alfil legislativo de Bullrich. De este combo político también formarán parte Alejandro Carrancio, Gastón Abonjo, Juan José Esper, Teodoro Vera Chávez y el reemplazante de Sotelo, Sebastián Pascual, por LLA; Fernando Compagnoni, Oriana Colugnatti, Abigail Gómez y Sofía Pomponio, por el partido amarillo.

Pero no todo termina ahí. También están próximos a acordar Guillermo Castello y Jazmín Carrizo, ambos con monobloques. El primero ingresó en 2021 en la lista de de Avanza Libertad que encabezó José Luis Espert; mientras que la legisladora, que entró en 2023 por la primera sección, responde de manera directa a Carolina Píparo, quien tras ser candidata a gobernadora se distanció de LLA.

“Se está trando de formar un gran bloque. Estamos viendo que funciones cumple cada uno. A mi lo que me preocupa es que se mantenga la coherencia ideológica. Hay integrantes de las más diversas orientaciones”, le dijo Castello a Data Clave. Y agregó: “Esa coherencia la puedo mantener en un monobloque, cuando tomo posiciones. Sacrificar eso es complejo porque es muy importante mantenerse alineado con el liberalismo de Milei. Solo hay que ver cómo funcionaría”.

Con la suma de Castello y Carrizo, el bloque alcanzaría los 13 diputados necesarios para convertirse en la primera minoría y dejar atrás al PRO que hoy responde a Macri y que cuenta con 12 legisladores propios en el bloque que lidera Agustín Forchieri. 

Sin embargo, esto podría cambiar ya que tras conocerse la triste noticias del fallecimiento del diputado radical Lorenzo Nátali, quien tomaría su lugar sería Gustavo Coria, cercano al diputado nacional Diego Santilli. De esta manera, ambos bloques podrían quedar empatados en la cantidad de legisladores como previa de la fuerte puja camino al 2025. 

Antecedentes

Cabe recordar que el acercamiento entre ambas filas tuvo su golpe de impacto tras un encuentro en Esteban Echeverría con Bullrich y el armador Sebastián Pareja como protagonistas. Tras esto, Macri mandó a renunciar a todos los consejeros del PRO en PBA y provocó la salida de Daniela Reich, cercana a la funcionaria nacional. Con este movimiento, Retamoso encabezó el quiebre de bloque y armó Libertad, el bloque con el que Bullrich dejó en claro su postura de alianza con el gobierno nacional.

Como es sabido en la Legislatura no existe la figura de interbloque y pese a que ambos espacios ya venían trabajando en conjunto ahora presentarían de manera oficial su principio de acuerdo. Según le confiaron a este medio, Romo quedará como presidente del nuevo espacio.

Se trata, sin dudas, de un golpe de efecto para el macrismo que, en los últimos días, desde el Congreso, le puso el freno a dos proyectos del gobierno nacional con el fin de marcar la cancha. Esta alianza obligará a que el expresidente de la Nación reorganice los próximos pasos a dar sabiendo que, sin LLA y la pata de Bullrich, es complejo que pueda tener chances a nivel provincial de darle pelea al justicialismo. Algo que, de seguir así, favorecería al gobernador Axel Kicillof ya que tendría a la principal oposición dividida.