Oscar Liberman, el otro libertario más votado: “Vamos a comprometer a la gente con la gestión”
Fue el candidato que recibió más votos en Bahía Blanca, ciudad donde se registró uno de los actos más imponentes de Javier Milei en la campaña. Es una de las cartas fuertes de La Libertad Avanza en octubre. Una propuesta de gestión alternativa: “Hay que terminar con las mezquindades partidarias".
El resultado de las PASO del domingo 13 de agosto sorprendió a propios y ajenos. La Libertad Avanza arrasó en todo el país y dejó a Javier Milei como el candidato a presidente más votado. La irrupción de los libertarios dejó plantado un escenario de tercios que ningún sondeo previo tuvo en cuenta. Pero no fue el líder del espacio el único de los liberales que resultó el más votado.
“Siempre sentí que nuestra propuesta iba a tener muchos votos. Convoqué gente con esa idea y tuve que convencerlos para que acepten, porque son todas personas que hacen el sacrificio de dejar la actividad privada para sumarse. Si no era competitivo no me metía. Siempre dije que iba a ser intendente”, afirmó el candidato libertario en Bahía Blanca, Oscar Liberman, a Data Clave.
Al igual que Milei, es economista, pero también escritor, músico, empresario y docente. Y conoce la política desde hace tiempo, ya que durante años fue asesor de concejales, legisladores y hasta intendentes. No obstante, nunca aceptó cargos ni oferta alguna para sumarse a los espacios tradicionales. Cumple 60 años en octubre, días antes de la elección y busca celebrarlos con una victoria en las urnas.
“Nunca me gustó la forma que se hizo siempre política en el país”, afirmó Liberman. Y agregó: “Pero ya cansado de la situación en la que está el país y mi ciudad, con la sensación de que todo lo que toca el Estado lo rompe, decidí involucrarme”. El dato: ni él ni el resto de su lista ocuparon nunca un cargo público. Vienen todos del sector privado. Y una perlita: “Hicimos todo a pulmón. El jingle me lo regaló un amigo que hacía música conmigo cuando éramos chicos”.
Una de las claves pasó por la campaña atípica: no hicieron publicidad, no pegaron afiches ni mandaron a hacer encuestas. Incluso la candidatura de Liberman se cerró al filo de la fecha límite, dejándolos con una campaña de instalación de menos de 50 días. “Nos dedicamos a ir a todos los barrios y sociedades de fomentos a tener reuniones de 2 horas y media para contarles a los vecinos qué y cómo lo queremos hacer. Y sobre todo, fuimos a escucharlos”.
Data Clave: ¿Qué es lo primero que hay que hacer en Bahía?
Oscar Liberman: Bahía Blanca está estancada. Ese es el primer diagnóstico, una brecha social muy importante. las inversiones que llegan no impactan en la ciudad. Y se han establecido barrios sin planificación. En lugar de crecer se ha amontonado. Hay como una frontera, por un lado donde hay servicios, con mejor o peor conectividad, y del otro lado una Bahía Blanca sin nada. La disociación es muy grande.
Bahía no tiene un Código de planeamiento Urbano actualizado, es el mismo desde los ‘70. Todos los intendentes dicen que lo van a actualizar y no lo hacen. Bahía no ha profesionalizado el ejercicio de la gestión. se hicieron cosas según el feeling del funcionario de turno. Mucha prueba y error, y eso lo pagan los vecinos con los impuestos.
DC: ¿Qué proponen que los diferencia de los demás?
OL: Nos especializamos en diseñar instrumentos, contar cómo vamos a hacer las cosas, no solo qué vamos a hacer. Asfalto, por ejemplo, van a hacer todos pero nosotros explicamos cómo lo vamos a hacer. Vamos a hacer un fondo fiduciario a 20 años para que los vecinos se contacten directamente con las empresas para hacer el pavimento. Que los vecinos también se comprometan, que no dependan del municipio. Se manejarían como un consorcio. Si tenés 1000 consorcios, de vecinos, tendrás 1000 obras en marcha. Lo único que incluye ese fideicomiso es una sobretasa muy chiquita, para que los vecinos que no lo puedan pagar, también tengan el asfalto.
Tenemos una propuesta para convertir las escuelas en centros barriales. Queremos que la provincia nos firme un convenio y nos permita solventar el gasto y el mantenimiento de las escuelas provinciales, desde que cierra la escuela hasta la medianoche. Ahí queremos poner conservatorio de barrio, estudio de danza, para que toda la vida cultural del barrio gire en torno a ese edificio.
DC: En caso de ganar, vas a necesitar tener mucho diálogo con la oposición, en un Concejo en minoría. ¿Estás dispuesto a tender puentes?
OL: Tengo relación con todos los dirigentes desde hace muchos años, soy amigo de (Nidia) Moirano (JxC) y hemos hablado muchas veces con (Federico) Susbielles (UxP). Todas estas cosas necesitan consensos. Queremos volver a lo que eran las gestiones de antes, vincular la contraprestación a lo que el vecino paga. Con los años, la gente terminó pagando muchas tasas y el gobierno le devuelve pocas obras.
En un escenario de tercios, cualquiera va a tener más oposición que concejales propios. El diálogo es algo que tiene matices. El diálogo en el Concejo es poco, se han aprobado muchas cosas a libro cerrado. Queremos construir un diálogo sobre cuestiones técnicas, separado de la ideología. Hay que debatir instrumentos, no entelequias.
DC: ¿Y si no ganan? ¿Cómo sigue la construcción de La Libertad Avanza en Bahía?
OL: Nosotros queremos llevar a fondo el planteo libertario. Son planteos poco centralistas, con la libertad como eje fundamental. Y queremos fortalecer esto de que las ideas de libertad no se queden “allá arriba” sino que se puedan aplicar. Queremos construir a futuro ese espacio, ganemos o no. Todos los instrumentos que estamos armando para educación, seguridad, los vamos a poner a disposición si no ganamos. El objetivo es que se hagan, no tener la patente de que son nuestros.
Parte de lo que está confirmando la gente con la elección es salir de las mezquindades de planteos partidarios, que solo los han alejado de la gente. Hay que comprometer a la gente con la gestión. Seguiremos dando la lucha desde el lugar que nos toque.