A menos de un mes y medio para el cierre de listas en la provincia de Buenos Aires y con las elecciones ya en marchas en otras jurisdicciones, el oficialismo y la oposición elevan la tensión política y, en algunos casos, la disputas ya parecen tomar forma personal.

El veto del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, a una ley que sancionó recientemente la Legislatura provincial, y que tenía como fin transferir de manera gratuita un predio a la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Mar del Plata, dejó en evidencia una puja que va más allá.

Sucede que promotor del proyecto fue el presidente del bloque de Juntos en la Cámara baja y precandidato a gobernador por la UCR, Maximiliano Abad, quien como es sabido está casado con la vicedecana de la facultad, Marina Sánchez Herrero. Por lo que el golpe sonó fuerte en la oposición.

Cabe recordar que desde la oposición partidaria de la UCR sostienen que Abad utiliza el partido  para "acuerdos personales" y que su postulación “solo tiene como fin darle vía libre al PRO y mantener tranquilos a los intendentes con promesas de cargos que no van a llegar”, le dijo a Data Clave un dirigente boina blanca. 

Desde un sector del radicalismo aseguran que Abad quiere armarle el camino a su mujer para llegar a la Corte Suprema en un eventual triunfo de Juntos. Con todo este marco de fondo, la decisión de Kicillof expone mucho más que un veto.

Además, con este rechazo, el gobernador expuso un error por parte de la bancada del Frente de Todos que, semanas atrás, acompañó el tratamiento exprés que terminó siendo sancionado de manera unánime. El problema quedó a la vista cuando desde la Dirección General de Cultura y Educación hicieron saber que el inmueble en cuestión “fue adquirido por la Asociación Cooperadora del Conservatorio Provincial de Música Luis Gianneo y está destinado al funcionamiento de ese servicio educativo”.

“La Facultad de Derecho de Mar del Plata tiene limitaciones edilicias que impiden su crecimiento demográfico estudiantil y, consecuentemente, limitan la oferta, que actualmente está muy por debajo de la demanda social requerida”, había manifestado el titular de la UCR bonaerense en su iniciativa, que finalmente quedó vetada por Kicillof.

Abad, que aún no se pronunció al respecto, sufrió un duro revés mientras continúa firme con la intención de representar a los radicales. Vale mencionar que el intendente Gustavo Posse y el diputado nacional Martín Tetaz se muestran con intención de competir en una interna que el propio presidente del partido se niega a abrir. 

“El gobierno de Kicillof no nos cuida, el gobierno no nos educa, no nos cura, no hace rutas y autopistas, no protege a las industrias y apaña a los delincuentes. Esta gestión está aplazada”, lanzó días atrás en la previa de un veto que impactó de lleno.