Gerardo Milman continúa generando un conflicto en la interna de Juntos por el Cambio, fundamentalmente en las filas del bullrichismo, sector en donde está alineado. Tras los escándalos suscitados por la denuncia que lo vinculó con el atentado contra Cristina Kirchner, surgieron más complicaciones al aparecer vinculado con prácticas irregulares en la designación de asesoras y una causa que lo señala como responsable del delito de dádivas vinculado a una empresa proveedora del Estado.

Ya en diciembre pasado, Patricia Bullrich dispuso su alejamiento de la campaña que Milman encabezaba a nivel nacional. Pero su situación en la cámara de Diputados -donde ocupaba la vicepresidencia segunda del bloque- quedó pendiente de resolver, luego de haber sido denunciado por sus pares, que pidieron su separación del cuerpo por “inhabilidad moral”.

Desde el Frente de Todos se impulsó una iniciativa a fines de 2022, que tuvo dos giros: uno a la comisión de Asuntos Constitucionales y el otro a la de Peticiones, poderes y reglamentos. “Ese es el procedimiento habitual cuando querés echar a alguien por inhabilidad moral”, explicó una fuente del bloque oficialista a Data Clave. Y agregó: “En Asuntos Constitucionales el quórum y la mayoría se logra con el culo y la firma de Graciela Camaño; en Peticiones, tenemos quórum propio. Con el dictamen firmado, necesitas 2/3 para echarlo. Seguro vamos a avanzar en lo que podamos con los nuestros cuando comience el período de ordinarias”.

Milman fue mano derecha de Bullrich durante su gestión en el Ministerio de Seguridad, donde afianzó su relación con el mundo de la inteligencia y las fuerzas de seguridad. Al momento del atentado a Cristina estaba al frente de la organización de la campaña de Patricia, quien incluso lo presentaba como su jefe de Gabinete en caso de llegar a la Casa Rosada.

Desde entonces, Milman no apareció más junto a la presidenta del PRO, que incluso designó a Sebastián García de Luca como jefe de campaña bonaerense en su lugar. Sin embargo, Milman no sólo sigue siendo diputado sino que además es el vicejefe del bloque del PRO.

La ausencia de Milman no fue tan evidente con la Cámara de Diputados en receso, pero el miércoles próximo Alberto Fernández encabezará la asamblea para dar apertura a las sesiones ordinarias y sería extraño que una autoridad de bloque pegara el faltazo.

"Si va a la asamblea nos matan los K con la foto en su banca y si no va lo van a acusar de ñoqui", se lamentan en el PRO. Desde el entorno del diputado caído en desgracia por sus propias desprolijidades, aseguran que su situación anímica es “preocupante” y que dudan mucho que pretenda estar sentado en su banca durante la Asamblea Legislativa.

Este fin de semana se lo pudo ver abandonando la casa donde vivía junto a la madre de su hija Florencia Retamoso -también diputada de Juntos por el Cambio, pero en la legislatura bonaerense- para irse a vivir a la casa de su hermano, donde continúa recluido y en un “pésimo estado anímico”. Algunas de sus personas más cercanas confiaron a este portal que “está sumido en un pozo depresivo que no puede superar”.