En la Reforma de la Constitución sancionada en 1994 se modificaron varios aspectos del texto original. Sin embargo, también hubo grandes olvidos. El más recordado es el de la autonomía municipal. A 27 años de aquella modernización de las normas, Buenos Aires sigue en estado de rebeldía, no cumple con la regla y vuelve a abrir el interrogante: ¿Los distritos pueden gobernarse por sus propios medios o tienen las manos atadas?

En esta línea, la presidenta de bloque de la Unión Cívica Radical en el HCD de Mar del Plata, Vilma Baragiola, presentó un proyecto de comunicación impulsando la creación de una Jornada de Trabajo a fines de “tratar los alcances de la autonomía municipal de la Provincia de Buenos Aires”.

El planteo de Baragiola, quien también es candidata a senadora provincial por la quinta sección, apunta directo a la Provincia y tiene como fin inicial recuperar los complejos de Punta Mogotes y la Rambla Casino, que funcionan bajo la órbita bonaerense.  

“Creemos que es de suma urgencia una provincia de Buenos Aires que funcione, y para esto necesitamos que los municipios que la integran sean autónomos, pudiendo así establecer reglas que contemplen las particularidades propias del lugar y teniendo en cuenta su idiosincrasia”, manifestó.

En diálogo con Data Clave, la edil asegura que “la idea es ir a los hechos. Involucrar al ejecutivo y al legislativo, como también a los diversos actores relacionados a infraestructura, educación, comercio y gastronomía y sentarlos en una mesa para sumar y tener un planteo con la institucionalidad que corresponde”

En concreto, la autonomía municipal no es algo sujeto a debate. Las provincias tienen la obligación de actualizar sus constituciones. Y, al no hacerlo, funcionan más cerca de la autarquía que de la autonomía. Una diferencia que fue clave a la hora de establecer la ley y que hoy parece parte de un juego de palabras.

El objetivo es claro. Desde el oficialismo buscan generar las condiciones para recuperar dos espacios de explotación directa. Y desde la Provincia lo ven como una cuestión meramente electoral. “Son jugadas de campaña que apunta a una porción del electorado local y que se apalancan en promesas que después carecen de fuerza. Lo mismo hizo Yeza en Pinamar. Una bomba de humo para salir de un fraude ocurrido dentro de su distrito”, dice una fuente del ejecutivo provincial en relación a la denuncia por defraudación con las Tarjetas Alimentar que involucra a dos empleadas del distrito.

Y es que el intendente PRO anunció hace tres semanas que irá por la autonomía municipal. “Yeza hizo un planteo y estamos dispuestos a avanzar en este tema. El algo que se adeuda. Hace años que estamos discutiendo esto”, sostuvo Baragiola.

Y agrega: “Punta Mogotes mira al mar, pero no mira el continente. Hay que convertirlo en un centro turístico. Están dadas las pautas legales para que lo devuelvan. En la actualidad hay tres delegados provinciales, podríamos tener dos municipales y uno de la Provincia para que sean los marplatenses los que decidan. Lo mismo para el casino. Se podría trabajar con otro tipo de inversión para volver a ser un centro turístico. Necesitamos cortar con la idea de los tres meses de verano y ver más allá y conseguir el traspaso municipal”.

El conjunto de balnearios era propiedad de una sociedad estatal denominada Proyectos Especiales de Mar del Plata S.E., convertida en 1984 a partir de un convenio celebrado entre la Provincia y la municipalidad, suscripto por el gobernador Armendáriz y el intendente Roig, en una entidad mixta, integrada por el gobierno de la Provincia y el partido de General Pueyrredón, denominada "Administración Punta Mogotes", que hoy subsiste.

La "intervención" que motivó la creación de la Administración Punta Mogotes, debía extenderse hasta cancelarse la totalidad de los compromisos asumidos con el BAPRO, pero más de 30 años después aquel importante patrimonio marplatense continúa bajo la esfera bonaerense.

Sumado a esto, el próximo paso de la mesa de trabajo a la que convoca el oficialismo es generar las condiciones para recuperar la administración del Complejo Turístico Chapadmalal, bajo la esfera nacional, “para reconvertir una construcción realizada en el proceso y darle una mirada actual”.