El nuevo Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA) recibió hoy el rechazo de la Comisión Directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) que anticipó que planteará su disgusto al Gobierno nacional.

Los integrantes de la junta “manifestaron la concreta preocupación ante las complicaciones en el acceso a insumos importados para la producción destinada al mercado interno y a la exportación”. 

Los representantes de la UIA “coincidieron en la necesidad de generar mecanismos previsibles que eviten discrecionalidades y permitan la planificación de la producción”.

La central que preside Daniel Funes de Rioja dejó en claro a través de un comunicado que “la necesidad de certidumbre, que no queda despejada con la mecánica dispuesta (en alusión al SIRA), será transmitido a las áreas de Estado correspondientes”.

El gobierno busca a través del SIRA reducir lo que alguna vez Cristina Fernández de Kirchner denominó “un festival de importaciones”.

Lo cierto es que el intercambio comercial de los ocho primeros meses del año arrojó un superávit de US$ 2.193 millones, por debajo de los US$ 10.655 millones de enero-agosto de 2021.

Para explicar esta caída en el saldo comercia habrá que destacar que, en lo que va del año, las importaciones aumentaron un 21% en precios y un 18,7% en cantidades, mientras que los valores de los productos que exporta Argentina subieron 19,7% promedio, con un volumen apenas 1,6% por debajo de igual período de 2021.