La Policía Federal reprimió a trabajadores judiciales que se manifestaban frente al Palacio de Tribunales en la Ciudad de Buenos Aires. Los efectivos golpearon y tiraron gases lacrimógenos, que alcanzaron al Secretario General de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación y referente de la CGT, Julio Piumato. El hecho se da una semana después de la represión a jubilados frente al Congreso nacional. 

La manifestación de los empleados de la justicia se llevaba a cabo en reclamo de mejoras salariales y la recomposición que les deben de julio y agosto. En declaraciones a C5N, Piumato confirmó que la represión comenzó cuando estaban desconcentrando la manifestación y que le tiraron con gas pimienta en la cara. “Somos más de 15 compañeros que tuvimos que ser atendidos por el SAME y centros asistenciales", señaló el secretario general de UEJN y agregó: "Hay dos compañeras que están siento atendidas porque el gas pimienta les quemó el pecho”

El referente de la CGT detalló que se llevaron detenido a un trabajadores, que luego fue detenido, pero que “fue procesado” por desacato a la autoridad. Piumato afirmó que fue “una provocación de la ministra de Seguridad” y confirmó que están preparando una denuncia penal. “No vamos a dejar de reclamar, mañana vamos a hacer un nuevo banderazo”, señaló el sindicalista.

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Los hechos de violencia se dan una semana después de la represión a jubilados que tuvo lugar frente al Congreso de la Nación. Los manifestantes se habían agrupado para protestar contra el veto a la Ley de reforma de la movilidad jubilatoria. Días después, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, justificó la represión afirmando que “las normas son claras y que no se corta la calle". Además,  señalo que la Policía “lo único que hizo fue pedirles a un montón de jóvenes de izquierda que suban al cordón, porque no está permitido cortar la calle”. 

Según la funcionaria, en la protesta “había 10 jubilados y muchos jóvenes que fueron a provocar” y detalló: “Los jubilados estaban tranquilos arriba de la vereda y salieron un montón de jóvenes de 25 a 30 años, estaban metidos en medio de la manifestación”. Frente a este panorama, los jubilados y organizaciones sociales se volverán a manifestar mañana para rechazar nuevamente el veto presidencial.