Rumores, comentarios, operaciones y varias cuestiones más circularon esta semana alrededor de la causa de los cuadernos y una decisión que debe tomar la sala I de la Cámara de Casación Federal: decidir si declara o no la inconstitucionalidad de la ley del arrepentido, impulsada durante el gobierno de Mauricio Macri en 2017. 

Los arrepentidos (o imputados colaboradores) fueron el eje principal de la causa de los cuadernos. Los 31 relatos que convalidó el fallecido juez Claudio Bonadio (respaldado después por la Cámara Federal) siempre fueron cuestionados en Tribunales por la forma en que se tomaron. No existió un registro ni fílmico ni de audio, solo a través del papel, como quedan plasmadas la mayoría de las declaraciones.

Ese es justamente uno de los puntos principales que cuestionan las defensas de varios imputados en la causa, como por ejemplo la de los empresarios Gerardo Ferreyra y Juan Lascurain y también la del ex ministro de Planificación Julio De Vido. También marcan el uso que tuvo la ley del arrepentido, a la que consideran en muchos casos como “extorsiva”.

“Las declaraciones que el imputado arrepentido efectuare en el marco del acuerdo de colaboración deberán registrarse a través de cualquier medio técnico idóneo que garantice su evaluación posterior”, marca el artículo 6 de la ley 27304. La interpretación de esas tres oraciones varía de acuerdo al interés de los involucrados. Los que trabajaron en la causa sostienen que el papel alcanza. Las defensas dicen que no ya que sin video ni audio no se puede garantizar la fiabilidad de las palabras. 

Con este conflicto en puerta es que Casación pidió que le remitieran audios o videos. Lo solicitó primero al Juzgado Federal 11 que ocupaba Bonadio (ahora a cargo de Marcelo Martínez de Giorgi); a la fiscalía federal de Carlos Stornelli y también al Tribunal que tiene gran parte del expediente ya en etapa de juicio. Allí quedó evidenciado (otra vez, pues era algo que se conocía) que nunca existieron videos de los momentos en que se arrepentían los involucrados.

Ahora, ¿por qué comenzaron estas semanas los rumores sobre una posible caída de la causa? Técnicamente, ya pasaron los días hábiles que la Cámara tenía para resolver el planteo realizado por la defensa. No obstante, no hay una posición mayoritaria ni una decisión tomada aún sobre cómo avanzar

Ana María Figueroa, Daniel Petrone y Diego Barroetaveña son los magistrados que deben tomar la decisión. Sobre ellos es que ahora surgen presiones desde distintos lugares: intereses económicos y políticos se entrecruzan (desde siempre) en la causa de los Cuadernos.

El fallo que tome Casación puede ser importante pero no está claro que influya directamente en la caída de la causa. Si puede influir en caso de que consideren que la aplicación de la ley del arrepentido estuvo mal o que la declaren inconstitucional. Así y todo, el expediente que está en el Tribunal Oral Federal 7 se deberá definir qué rol juegan los arrepentidos y cuán vital es su aporte. Todavía no hay fecha de juicio prevista.

En Comodoro Py recuerdan el fallo que dictó María Servini, a instancias del fiscal Jorge Di Lello, en un desprendimiento de la causa principal. “Lo que el legislador estableció fue, primero, tener un registro por un medio independiente del sumario, y segundo, al hablar del medio técnico entendió necesario, que un soporte de las características referidas contuviera la declaración filmada o grabada”, había dicho el representante del Ministerio Público en el dictamen donde planteó el sobreseimiento de Máximo Kirchner, Eduardo "Wado" de Pedro y Andrés "Cuervo" Larroque. 

Ahí se dio el primer puntapié donde se cuestionó no solo a las no-grabaciones sino también a las declaraciones de Oscar Centeno y la aparición de los cuadernos (mágicamente luego de la afirmación de que habían sido quemados). En Retiro, dudan de la fortaleza de las imputaciones desde hace tiempo: ¿hay pruebas en la causa más allá de los arrepentidos?