Ahora que la lupa está puesta sobre el diputado Gerardo Milman, con sus pedidos de informes sobre la seguridad de CFK, sus comentarios sobre el atentado a la vicepresidenta antes de que ocurriera, o sus vínculos con una empresa proveedora del Estado cuando era viceministro de Seguridad, una cuestión que llama poderosamente la atención es su elenco de asesoras.

“Cuando la maten estaré camino a la Costa”, dijo Milman, según testigos, en una confitería situada frente al Congreso, días antes del ataque a Cristina Fernández de Kirchner, frente a su domicilio en la Recoleta. Por esa frase lo investigan en la causa que está a cargo de María Eugenia Capuchetti.

En la misma mesa estaba Carolina Gómez Mónaco, actual asesora del legislador. Se trata de una exmiss Argentina que Milman designó cuando era el segundo de Patricia Bullrich, como directora de la Escuela de Inteligencia Criminal del Ministerio de Seguridad. 

Que se sepa, Gómez Mónaco no tenía ninguna formación ni antecedentes para ocupar un cargo clave en la estructura de Seguridad, justamente una de las banderas del gobierno anterior. Nunca Bullrich ni Milman salieron a explicar esa insólita designación.

Gómez Mónaco también es objeto de investigación en la causa por el ataque a CFK que la jueza Capuchetti finalmente delegó en el fiscal Carlos Rívolo, luego de haber sido recusado por los abogados de la vicepresidenta.

Cuando fue elegida Miss Argentina 2012.

En noviembre de 2012, se convirtió en Miss Argentina, en un certamen que se desarrolló en Luján, con la “participación de 15 señoritas”. Sorpresas te da la vida, cinco años más tarde, se desempeñaba en el Ministerio de Seguridad a las órdenes de Milman.

Para tratar de entender, de algún modo, ese nombramiento habrá que buscar en los lazos familiares de Gómez Mónaco. Según fuentes de la investigación consultadas por Data Clave, Carolina es hija de Dora Mónaco, sargento primero retirada de la Policía Federal. También su abuelo, Salvador Miguel Monaco, se retiró como suboficial mayor en la misma fuerza. Fue además socio fundador del Circulo de Suboficiales de la PFA.

Dora, la madre de Carolina, estuvo en pareja, según las mismas fuentes, con el excomisario general Roberto Galvarino, quien habría sido el nexo con Milman, para que que la Miss Argentina desembarcara en el Ministerio de Seguridad.

Galvarino era el titular del Superintendencia de Seguridad de la Policia Federal, jefe de todas las comisarías de la ciudad de Buenos Aires, cuando se produjo la fuga en septiembre de 2000, de tres peligrosos delincuentes del Departamento Central de la Policía Federal. Uno de los evadidos era Daniel “Tractorcito” Cabrera, integrante de la banda del legendario Luis “El Gordo” Valor. Los otros dos estaban acusados del homicidio del vicepresidente paraguayo Luis María Argaña.

Dora, la mamá de Carolina.

Galvarino tuvo que renunciar a su cargo, cuando fue imputado por el entonces juez federal Gabriel Cavallo, de tener algún grade de responsabilidad en la fuga o, al menos de haber armado un esquema para encubrirla. El superior de Galvarino, era Rubén Santos, a cargo de la Federal durante la presidencia de Fernando de la Rúa.

Uno de los hijos de Galvarino y su ex esposa, María del Carmen Conforti, tienen a su nombre una empresa dedicada la venta y provisión de equipos de telecomunicaciones, Tauri Certs SRL, que se creó en agosto de 2020, de acuerdo con los registros oficiales.

Al parecer, impulsada por Galvarino, Carolina estudió Derecho en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, aunque según quienes la conocen a ella siempre le interesó más la estética y el mundo del modelaje.

En esa línea, Carolina es la titular de un centro, Luxa Estética, situado en Corrientes 1135, que comenzó a funcionar en septiembre de 2017, en la misma época en que fue designada por Milman como titular Escuela de Inteligencia del Ministerio de Seguridad. Su hermana, Carolina, contadora de profesión, fue nombrada como jefa de Administración de la Dirección de Inteligencia Criminal, lo que le permitía manejar fondos de la cartera.

Carolina está en pareja con Fernando Daga. Los dos tiene una sociedad en común Salvatore Grouo, que también se creó en septiembre de 2017. Daga es además socio de un empresario Rodrigo Fernández Prieto, quien sería un desarrollador inmobiliario.

Fernando y Carolina habría viajado a Puerto Madryn, días después del ataque a CFK. Cuando hace dos semanas entregó su teléfono en el juzgado donde se investiga el atentado, llevó un aparato nuevo porque dijo que el anterior lo había cambiado.