El jefe de los estatales de UPCN y número tres de la CGT, Andrés Rodríguez, le abrió la puerta a la posibilidad de que los gremios discutan elevar la edad jubilatoria, siempre y cuando sea una decisión "voluntaria" de cara trabajador.

El dirigente gremial conversó con AM 750 y se le consultó sobre esta medida a poco de que el Gobierno enviará al Congreso el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Si bien desde el Frente de Todos niegan que habrá una reforma previsional y laboral, los fantasmas del último acuerdo ponen a algunos gremios en guardia.

Rodríguez, desde su óptica, planteó: “Hace tiempo que se está discutiendo la extensión de la edad jubilatoria, porque hay cuestiones que contemplar: ha crecido la expectativa de vida y se extiende en el tiempo la capacidad de trabajo de hombres y mujeres. En la medida en que esto sea voluntario y haya fondos para sostenerlo, me parece que no es una mala idea que puede ser debatida”.

El mensaje del dirigente gremial coincide con una iniciativa en la que avanza el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, que evalúa modificaciones en las edades para acceder a la jubilación. El plan consiste en elevar a cinco años la edad jubilatoria, aunque sería algo "voluntario y opcional". En el régimen de escalas, quedaría que las mujeres trabajarían hasta los 65 años, mientras que los hombres hasta los 70.

Andrés Rodríguez y Alberto Fernández

Pero esta iniciativa y la "voluntad" de la CGT no va en línea con el último discurso de Alberto Fernández en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, donde el Presidente aseguró que no habrá reformas impuestas por el FMI.

Por su parte, el líder de UPCN hizo mención a las internas en el Frente de Todos y reconoció que no es muy alentador el contexto actual. “Vemos heterogeneidad en el oficialismo y en la oposición. Esto no es positivo en un tema de esta naturaleza: está bien que haya debates, pero debe haber homogeneidad en cuanto a cuál es la salida para la Argentina”, planteó Rodríguez.

Y a su vez, lanzó una indirecta contra Alberto Fernández: “El gran problema que tenemos es la falta de liderazgo político. En este momento se requiere un liderazgo y una homogeneidad de pensamiento político. Esto es lo que está fallando”.

Y por último, planteó: “No quiero personalizar: cada uno tiene derecho a tener su pensamiento, pero en un partido oficialista, con función de Gobierno, no puede haber tantas disidencias tan contrapuestas. Esto es desacertado”.