Kicillof dio marcha atrás y la final de los Juegos Bonaerenses se disputará en Mar del Plata
El gobernador intentó descentralizar la competencia y provocó un fuerte rechazo opositor que lo llevó a volver sobre sus pasos. Desliz político previo a las elecciones.
Dos días después de dar a conocer el cronograma dispuesto para la realización de la edición número 30 de los Juegos Bonaerenses, la Provincia dio marcha atrás en un nuevo traspié político rumbo a lo que serán las elecciones generales de noviembre.
La idea del ejecutivo bonaerense era descentralizar la competencia que históricamente se desarrolla en Mar del Plata para llevarla a diferentes municipios, principalmente, del Conurbano con el objetivo principal de llevar un escenario de disfrute y alegría a los barrios.
En otras palabras, comenzar el plan territorial para ganar la buena recepción vecinal y ganar el voto rumbo a las elecciones. Pero nada salió según lo planeado y apenas 48 horas después de haber dado a conocer las diferentes sedes, gran parte de ellas gobernadas por el Frente de Todos, se decidió volver al plan original y mantener a Mar del Plata como sede única.
Así lo anunció el Gobierno bonaerense, a través de la Subsecretaría de Deportes dependiente del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad. La explicación oficial fue que “debido a los anuncios recientemente realizados por las autoridades nacionales y provinciales respecto a las nuevas aperturas que se dan en el marco de la baja sostenida del número de casos diarios de COVID 19 y del porcentaje de población ya inoculada, la Subsecretaría de Deportes de la provincia de Buenos Aires anunció que la Final Provincial de los Juegos Bonaerenses Edición 30º se realizará en Mar del Plata”.
Desde el Ejecutivo provincial dieron a conocer que la competencia se realizará en noviembre y que mantendrá su formato tradicional, de manera centralizada y presencial, en la ciudad balnearia.
Se trata de un evento que contó con más de 100 mil inscriptos y que es mucho más que una competencia. “Los Juegos Bonaerenses y los Juegos Evita tienen su estructura armada con todo lo que es hotelería. Es mucho laburo. Es algo que todos tienen agendado y que está en el calendario porque moviliza un sector de la economía muy importante para Mar del Plata”, le dice Guillermo Volponi, concejal de Juntos, a Data Clave.
Y agrega: “El sentido de que se hagan acá no es solo deportivo, para muchos significa la posibilidad de conocer el mar. Los pibes vienen entusiasmados por tener contacto con la playa”.
Y sobre el cambio de decisión, asegura que “de seguro hubo un llamadito de alguien más lúcido. Hoy Mar del Plata tiene una gran desventaja con respecto a las otras ciudades turísticas del país y es que la Provincia no está a la altura de acompañarla, algo que por ejemplo sí hizo Scioli. Pero Kicillof no tiene puesta la mirada en nosotros”.
Por su parte desde el Ente Municipal de Deportes (EMDER), su presidente Andrés Macció, habían dejado en claro en diálogo con medios locales que “la logística para poder desarrollar ese plan de finales descentralizadas es muy compleja, no solo para General Pueyrredon, sino también para otros municipios de la provincia. Nosotros, como ente de deportes, hemos enviado una nota a la Subsecretaria Deportes solicitando una reunión para plantear la posibilidad de otro escenario. Si no se desea concentrar a todos los finalistas en una misma semana, se podría dividir en dos semanas, o incluso en tres”.
Ante este escenario, Javier Lovera, subsecretario de Deportes bonaerense, asegura que se trató de “un cambio en relación a la situación epidemiológica. Nosotros desde principio de año estamos abocados a la realización de este evento. Y desde entonces contábamos con cuatro escenarios: que no se haga, que se haga en formato mixto, que se descentralice de Mar del Plata y que se pueda hacer en Mar del Plata, que era el principal hito”.
El problema surgió cuando el pasado martes se dieron a conocer las flexibilizaciones a nivel nacional. Sucede que ese mismo día desde Deportes habían dado a conocer el cronograma descentralizado. Sin embargo, producto de los cambios, Lovera dialogó con Kicillof la posibilidad de poder hacer las finales en Mar del Plata y “el gobernador lo autorizó”.
Durante esas 48 horas entre una decisión y la otra, desde Mar del Plata se manifestaron en contra de la Provincia por tratarse de un evento que ya es una marca local. Se trata de una competencia por la que ya pasaron 20 millones de chicos, entre ellos Manu Ginobili, Luis Scola o el Kun Agüero, por mencionar algunos casos, a lo largo de historia.