Intendentes PRO presionan cada vez más fuerte para conseguir la boleta de unidad en distritos de PBA
Los alcaldes quieren evitar las PASO y llevar a las dos listas de candidatos del partido amarillo. Buscan subir el piso de las minorías locales en caso de no lograr acuerdo.
La interna PRO aumenta. Y ya no queda margen para lograr la unidad. Pero claro, como se suele decir, los tiempos de la política son otros. Y a falta de 18 días para el cierre de listas, puede pasar cualquier cosa. Eso sí, los intendentes bonaerenses tienen una postura tomada: no quieren competencia. Y, al menos, buscan poder lograr el acuerdo que no se refleja a nivel nacional ni provincial, al menos en los distritos.
En otras palabras, los jefes comunales buscan aplicar el modelo CABA donde más allá de sufragar por separado como parte de la votación concurrente, Jorge Macri logró establecerse como el candidato único de la dirigencia amarilla.
La referencia interna tiene sentido. Se trata, como dijo el propio Cristian Ritondo, a la salida de la reunión de la mesa provincial de este lunes, del único bastión jurisdiccional del partido amarillo. “Hay que discutir ideas, pero respetar la casa común que es JxC y el PRO. Tenemos que cuidarnos entre nosotros, no desprestigiar candidatos. En definitiva, Patricia es la presidenta del partido y Horacio Rodríguez Larreta es el único gobernador del PRO".
Lo cierto es que los jefes comunales volvieron a elevar el reclamo hacia arriba para poder fortalecer los territorios y evitar quiebres que después se traduzcan en fugas de votos en las generales. “Tenemos más para perder que para ganar. Nos puede salir el tiro por la culata”, le dijo a Data Clave uno de los alcaldes que estuvo presente en la cumbre de la mesa provincial.
Pero no todos los jefes comunales piensan igual. Hay quienes consideran que la posibilidad de una PASO enriquece. “Son los menos”, sostiene la misma fuente. Pero existen. Y defienden a rajatabla la idea de Patricia Bullrich de dar la discusión en todo los distritos. Incluso en los que ya se manifestaron a su favor.
Esto podría pasar hasta en el distrito donde comanda su candidato a gobernador, Néstor Grindetti, quien en las últimas horas aprovechó para mojarle la oreja a su rival. Y en relación a la posibilidad de una PASO con su delfín Diego Kravetz, aseguró que “no tengo problema en hacerlo. Acá en Lanús hay pintadas de Santilli, si tiene un candidato iremos a internas”.
La presión de los intendentes es concreta. Y van por más. Es que, llegado el caso de no poder sortear la posibilidad de ir con la boleta de la "V" corta como vienen reclamando, piden subir el piso con respecto al 2021 y superar el 30 por ciento para lo que es el ingreso de concejales.
El problema que enfrentan es que eso no les garantiza mucho ya que la pelea pasará más por lo que arrastre la boleta nacional que por aquello que puedan tirar a favor desde abajo o forzar un corte de boleta. Las diferencias son marcadas. Los jefes comunales del AMBA entienden que el voto mayoritario proviene de la puja nacional mientras que los del interior confían en su propia tracción alejados de la problemática centralista.
“Estamos en una encerrona al pedo. Cuando se incorpore al radicalismo de Abad, que es el que tiene los intendentes, los van a tener que respetar. La pelea hoy se da en el marco de la mesa del PRO, pero cuando se lleve esta discusión a la mesa de Juntos todos los propios van a tener que ir con la “V” corta”, manifestó un jefe comunal en diálogo con este medio.