Intendentes en pie de guerra: quiénes apoyan y quiénes se oponen al toque de queda
En Provincia de Buenos Aires hay mucha preocupación por el aumento de casos y se tomarían decisiones para bajar la curva de coronavirus. En el medio están los líderes comunales: resistencias en General Pueyrredón y Pinamar, “mayor comprensión” en Villa Gesell y dudas en La Costa.
Tal como viene anticipando en exclusiva Data Clave, hay una fuerte preocupación del Gobierno Nacional por el aumento de casos de coronavirus. Esto se extiende a la Provincia de Buenos Aires, donde ven que hay un notorio relajamiento en las playas argentinas, epicentro actual del virus. Ante la inminente toma de medidas, los intendentes de los distritos de la quinta y sexta Sección Electoral juegan su partido.
En el inicio de la pandemia se vio una articulación clara entre Nación, Ciudad y PBA para poder tomar medidas sanitarias y evitar el aumento de casos. Aunque con el correr del tiempo cada sector empezó a mostrar su autonomía y tomó decisiones de cara a su electorado. Mientras en Provincia había mayores restricciones, en Ciudad se intentaban flexibilizar las actividades comerciales.
Ahora lo situación está focalizada en las playas argentinas, aunque en CABA también se dispararon los casos y los expertos siguen de cerca la situación. Hoy Alberto Fernández manifestó que “si no tenemos responsabilidad, el riesgo de que todo vuelva a paralizarse existe”.
Según pudo saber Data Clave, el gobernador bonaerense Axel Kicillof convocó a los intendentes para mañana a una reunión a las 9.40 en San Bernardo. En el gabinete hay cuatro medidas en carpeta que se analizan por estas horas para frenar la marea creciente de contagios: toque de queda nocturno, aforo en playas y lugares de verano, control en transportes públicos e inspecciones en las calles para evitar aglomeración.
En ese sentido, cada intendente empieza a jugar su partido. Uno de los casos más resonante es el de Martín Yeza, líder comunal de Pinamar, el distrito más señalado en este último tiempo por la gran cantidad de fiestas clandestinas y desborde en las playas.
Su postura decididamente será oponerse al toque de queda y esto le dijo a La Nación: “Las prohibiciones no van a mejorar la situación epidemiológica. Al contrario, las reuniones se van a hacer en espacios cerrados, lo que va a empeorar todo”.
En la misma línea se encuentra Guillermo Montenegro, intendente de General Pueyrredón que se encarga del control de las playas de Mar del Plata.
El que se mostró en distinta sintonía es Gustavo Barrera, que además de ser intendente de Villa Gesell, es perteneciente al oficialismo. Hoy manifestó en el Destape Radio que “vamos a apoyar todas las medidas que cuiden la salud y la vida” y que “si la provincia plantea un toque de queda nocturno lo vamos a apoyar”.
Uno de los intendentes que también tendrá peso en este encuentro es Cristian Cardozo, líder comunal del Partido de La Costa, el destino más cercano a Buenos Aires en este verano en pandemia.
De momento no fijó su postura sobre las restricciones sanitarias, aunque le pidió conciencia a quienes ingresen a su distrito a través de twitter: “Estamos muy contentos de que en esta temporada tan especial unas 616.000 personas nos hayan elegido en diciembre para descansar en nuestros más de 90 kilómetros de playa. Lo que queremos pedirles es que sigamos disfrutando sin dejar de cuidarnos”.