El intendente de Hurlingham, Juanchi Zabaleta, se presentará este miércoles a las 15 ante los concejales locales con para abrir un nuevo periodo de sesiones ordinarias del HCD. Con una particularidad. Es que el jefe comunal no estará presente en el recinto. El mandamás presentó en las últimas horas un escrito para solicitar llevar adelante la sesión a través de “alguna de las plataformas de videoconferencia habituales”.

¿Los motivos? “Tratarse de una fecha especial por el inicio del ciclo lectivo y en vista de las invitaciones recibidas” de parte de Nación y Provincia para asistir a la apertura de sesiones.

Como era de esperar, la novedad no cayó bien para adentro del Frente de Todos. De esta manera, Zabaleta evita presentarse ante un cuerpo integrado en su mayoría por ediles de La Cámpora. Y ante el temor de algún abucheo o, peor, la misma indiferencia, el jefe comunal decidió enviar la misiva para ser autorizado.

Desde la presidencia del HCD, a cargo de Cecilia Sáenz, aprobaron su pedido. Eso sí, sin dejar pasar lo evidente y dejaron constancia del “profundo disenso con la metodología propuesta”. Y agregaron: “No está a la altura de la institucionalidad que nos merecemos. No se puede comprender cómo se prefiere una sesión inaugural por Zoom cuando la pandemia terminó hace dos años”.

Cabe recordar que Zabaleta volvió al distrito tras su paso por el Ministerio de Desarrollo Social para presentarse en las próximas elecciones e intentar revalidar su mandato. Pero la situación no es fácil. La Cámpora, a través del intendente interino, Damián Selci, tomó las riendas del distrito en su ausencia y armó un gobierno casi paralelo con el fin de exponer la gestión local y de esa manera buscar el salto para competir de manera interna.

Desde entonces, los desplantes fueron varios. Vale mencionar que, dos meses atrás, Zabaleta echó a cuatro funcionarios cercanos a La Cámpora y que provocó una renuncia masiva de otros tantos en solidaridad con sus compañeros.

Tras los conflictos internos para el armado de listas del 2021 y para la presidencia del PJ local, se anticipa que el cierre de nóminas de cara a las elecciones de este año será, cuanto menos, difícil. La Cámpora no está dispuesta a ceder el control que tiene en el HCD, donde tiene una buena mayoría con respecto a los ediles que responden a Zabaleta, y también quiere salir a pelear el control del distrito. 

“Tenemos que dejar de figurar en los medios por los papelones que hace el intendente. Hurlingham es sinónimo de conflicto porque Zabaleta no hace las cosas como corresponde y después sale con alguna opereta de sus medios amigos”, le dice a Data Clave un dirigente kirchnerista local.

Así las cosas, las diferencias internas no hacen más que reposicionar a la oposición que, atenta a lo que sucede, busca sacar un rédito político que les permita tomar el poder por primera vez desde la creación del municipio.

En las últimas horas el jefe comunal aseguró en dialogo con C5N que es necesario cortar "con el petardeo y con los niveles de tensión porque hay una sociedad que no la está pasando bien”. Ahora habrá que ver si es posible hacerlo en lo local.