La iniciativa para poner el nombre del extenista argentino, Guillermo Vilas, a una calle en Bolívar generó un duro e inesperado enfrentamiento entre el oficialismo y la oposición en el Concejo Deliberante local. Tal fue la batalla que tras conocerse los votos de todos los ediles tuvo que intervenir el presidente del HCD para validar su voto doble y de esa manera desempatar, como parte de la analogía, un partido muy complejo.

El bloque de Unión por la Patria había presentado un proyecto de ordenanza que, para sorpresa de muchos, recibió el rechazo de los concejales del PRO, la UCR y La Libertad Avanza. ¿Los motivos? Que el mejor tenista argentino de todos los tiempos no tiene ningún tipo de vínculo con el distrito. Como es sabido, Vilas nació en Mar del Plata.

Para colmo la iniciativa había sido presentado por el mismo presidente de del HCD, Franco Canepare, quien argumentó que “cualquier vecino de la ciudad puede presentar a este Concejo una iniciativa. Esta solicitud es de un vecino que está llevando adelante una inversión importante que tiene que ver con el desarrollo deportivo, en un lugar nuevo que no tiene hoy frentistas y tampoco altera la vida normal de las personas”. La referencia es en relación a un complejo tenístico que se está llevando en la zona.

Sin embargo, no alcanzó. Y el voto quedó dividido en ocho a favor y la misma cantidad en contra. Desde la oposición fueron contundentes al respecto: "Le estamos poniendo nombre a la calle de un emprendimiento privado que todavía no está terminado", manifestó el presidente de bloque de Juntos-UCR-CC, Luciano Carballo. Y agregó: “Hay cantidad de bolivarenses que han invertido en Bolívar durante años y nadie ha pedido nombre a una calle”.

Además, dejó en claro que "se está violando una ordenanza, está bien, con una excepción. Durante muchos años este gobierno dijo que no iba a hacer excepciones, por eso se hizo una ordenanza que dejaba en claro que para que una calle de Bolívar tuviera su nombre, la persona tiene que tener más de cinco años de fallecida".

Antes de desempatar con su propio voto doble, el titular del HCD reconoció que si bien se estaba exceptuando un artículo de la ordenanza 2498/18, no se estaría cometiendo ninguna irregularidad y expresó: "Mucha gente se pregunta por qué los homenajes no se hacen en vida; las personas se glorifican luego de su fallecimiento y no tiene por qué ser así. Las cuestiones, por contexto, van modificándose".

Como si fuera poco, la discusión generó una nueva. O mejor dicho, una más vieja. Es que entre los argumentos de la oposición pidieron explicaciones de por qué Jorge Martínez Boero, un reconocido piloto de automovilismo quien compitió tanto para Ford como para Chevrolet en los 18 años que participó del Turismo Carretera (TC) entre 1967 y 1985 no tiene ninguna calle a su nombre cuando ya falleció hace más de 20 años. 

El “Gaucho de Bolívar”, como era conocido, ganó 10 carreras y obtuvo un campeonato (1983) y es uno de los principales referentes del deporte local. Incluso, su hijo, Jorgito, también dejó su huella a través del motociclismo. Falleció cuando promediaba la primera etapa de la competencia que une Argentina, Chile y Perú, en la edición 2012 del Dakar.