Fernández, sobre la nueva cuarentena: "Siento que no fui escuchado y advertí que esto podía venir"
El jefe de Estado habló de las medidas actuales y aseguró que "sólo serán nueve días". Explicó que se trata de la política "martillazo", que servirá para bajar los casos y poder "barajar y dar de nuevo". Dio explicaciones sobre dólar, exportación de carne y acuerdo con el FMI.
El presidente Alberto Fernández afirmó que "no puede haber 24 planes distintos para enfrentar la pandemia" de coronavirus, en función de cada una de las jurisdicciones federales que tiene el país, y aseguró haber advertido lo que podía pasar ante una segunda ola de contagios pero lamentó que algunas autoridades provinciales no lo hayan escuchado.
"Siento que no fui escuchado y advertí que esto podía venir. Hubo municipios y provincias que mantuvieron todo abierto en las últimas semanas y eso nos pasa porque Argentina es un país federal. Pero el covid no ha leído la Constitución Argentina y afecta a todos por igual", sostuvo Fernández en declaraciones al canal CNN en Español.
En relación a la ley que se discute en el Congreso para darle al gobierno herramientas para administrar la situación sanitaria, Fernández aseguró que no le pide "superpoderes" al parlamento, ya que la iniciativa que se envió "se los restringe".
"Hasta en eso la oposición miente y se equivoca. Es tiempo que estemos unidos y no hagamos política con la pandemia y tengamos un mismo criterio", subrayó.
En relación al tema de habilitar el turismo interno durante Semana Santa, a principios de abril, Fernández aseguró haber desaconsejado las aperturas en esos días y lamentó que los mandatarios provinciales o municipales no lo hayan seguido.
"Entiendo lo importante que puede ser el turismo para Bariloche, Jujuy, o MIsiones. Dijimos que eso no era bueno (por la circulación de turistas). Tomé medidas estrictas para inducir a a que me siguieran. Si no lo hacen, no tengo solución", sostuvo.
El presidente afirmó que en estos nueve días de restricciones se aplicará "la estrategia del martillazo", que le permitirá al Gobierno "barajar y dar de nuevo" para ganar tiempo con los sistemas de salud y cortar los contagios.
"Si todos cumplimos y respetamos las reglas, es posible que lo logremos, está previsto que sea así. Lo último que quiero es que la gente padezca más de lo que ya padece, la gente padece lo que dejaron en el 2019 y ahora se le sumó la pandemia", remarcó.
Fernández observó que "hay una fantasía" de que Argentina "sólo le compró vacunas a los comunistas", en relación a los convenios con la Federación Rusa para importar las dosis de la Sputnik V y aseguró que habló "con todos los productores de vacunas".
"Pfizer probó su primera vacuna acá, en Argentina. ¿Por qué no iba a querer comprarla? Ellos no cumplieron con las entregas en varios países y eso fue en parte porque Estados Unidos decidió preservar las vacunas para sus habitantes", explicó.
En cuanto a la inflación, consideró que ese es una cuestión cíclica en Argentina, y que "hay empresarios que nunca quieren perder la oportunidad y consideran que siempre es su momento" de aumentar los precios.
"Al frenar la exportación de carne buscamos que haya un volumen que se destine al mercado interno. Sabemos que la entrada de China como comprador al mercado internacional complicó la cuestión interna. Esperemos llegar a un acuerdo en este lapso con los productores. Pero no vamos a perjudicar a los argentinos, no vamos a aceptar que nos se los respete", advirtió.
En relación al FMI, el jefe de Estado estimó que se está cerca de lograr un acuerdo sobre la sobretasas que le cobra el organismo a los países deudores como Argentina.
"El mundo hoy no tiende al equilibrio fiscal. El plan de Joe Biden (presidente de los Estados Unidos) no tiene que con eso. El FMI divide el mundo en tres franjas, como si los países fueran hermanos. Al mayor le exigen ser perfecto. El menor es el mimado y al del medio no le prestan atención. Argentina está en el medio y por eso no la ayudan", apuntó.
Por último, sobre la postulación de Daniel Rafecas para el cargo de jefe de los fiscales, el mandatario aseguró que "sigue siendo" su "candidato" y apuntó que "si hoy no tenemos" una persona al frente de la Procuración General de la Nación con acuerdo del Senado se debe "a las presiones que ejerció el macrismo para que Alejandra Gils Carbó renunciara al cargo".