Escándalo internacional: denuncian que ministro de Cambiemos estaba “borracho” al sellar un acuerdo con el Reino Unido por Malvinas
En 2016, el entonces viceministro de Asuntos Exteriores de Argentina, Carlos Foradori, negoció un pacto ampliamente criticado con Gran Bretaña, en el que se acordó "eliminar todos los obstáculos" para desarrollar depósitos de petróleo alrededor de las Islas. Ahora, su par británico de aquel momento, Alan Duncan, reveló en sus memorias publicadas recientemente que el funcionario se encontraba en estado de ebriedad.
La soberanía de la Argentina sobre las Islas Malvinas es uno de los temas centrales de este gobierno en materia de política exterior. En cada oportunidad, se manifiestan desde la Rosada en pos de recuperar un diálogo con el Reino Unido para resolver la cuestión por vías diplomáticas. Y claro, también lanzan dardos contra la gestión del expresidente Mauricio Macri, que aseguran no solo descuidó el reclamo sino que además actuó en perjuicio del mismo.
En este sentido, una reciente publicación en en el Reino Unido encendió todas las alarmas de la diplomacia internacional. Denuncian que ministro de Macri estaba “borracho” al sellar un acuerdo por Malvinas.
En 2016, el entonces viceministro de Asuntos Exteriores de Argentina, Carlos Foradori, negoció un pacto ampliamente criticado con Gran Bretaña, en el que se acordó "eliminar todos los obstáculos" para desarrollar depósitos de petróleo alrededor de las Islas. Ahora, su par británico de aquel momento, Alan Duncan, reveló en sus memorias publicadas recientemente que el funcionario se encontraba en estado de ebriedad.
Allí, Duncan afirma que Foradori “le estrechó la mano” al concluir el acuerdo a las 2 de la madrugada en la bodega de la embajada británica en Buenos Aires, y que estaba “tan borracho” que olvidó lo que había acordado cuando se despertó a la mañana siguiente.
En sus memorias, In the Thick of It , Duncan señala que el 12 de septiembre, su primer día en la ciudad, se reunió con el “excelente” nuevo embajador del Reino Unido en Argentina, Mark Kent. “Bajo la residencia de la embajada hay una fabulosa bodega, muy bien iluminada, con las paredes forradas de botellas de Merlot”, continuó Duncan. “El escenario es bastante agradable para una reunión y nos juntamos allí con Carlos Foradori, el viceministro de Asuntos Exteriores”.
El dato fuerte viene a continuación: “Fue un buen telón de fondo diplomático para las delicadas negociaciones para asegurar la obtención de vuelos adicionales a las Malvinas; por millones de razones se requiere la cooperación de Argentina para cualquier conexión que pase por tierra firme. A medida que una botella tras otra iba pasando, las negociaciones mejoraban. A eso de las 2 de la mañana nos dimos la mano con un acuerdo general”. Y dispara: “Al día siguiente, Mark Kent dice que Foradori acaba de llamar por teléfono para decir que estaba tan borracho anoche que no podía recordar todos los detalles”.
Por su parte, Foradori refutó los recuerdos de Duncan sobre los acontecimientos en la bodega. En diálogo con el sitio Declassified -medio que dio a conocer el escándalo- aseguró que “lo que describe ahí es completamente fantasioso”. Y agregó: “el comunicado es demasiado largo para haber sido formulado en una noche”.
En la misma sintonía, explicó que “los distintos niveles de autorización que se requieren dentro del Ministerio de Relaciones Exteriores impiden que cualquier funcionario o diplomático pueda decidir arbitrariamente sobre algún tema, en particular sobre uno tan sensible como el de las Malvinas. Cada tema analizado en la declaración necesitaba ser validado posteriormente en acuerdos formales”.
Guillermo Carmona, titular de la Secretaría de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, dijo a Declassified: “La política del gobierno de Macri, después de la intervención de Foradori, podría haber traído graves consecuencias para la posición de Argentina sobre las Malvinas”
Y añadió: “En su momento, pedimos la dimisión de Foradori porque creíamos que había hecho cosas fuera de lugar, y si no hubiera sido por la oposición del Parlamento las consecuencias podrían haber sido muy graves.”
Sobre las revelaciones relacionadas con la bodega, Carmona añadió: “No me sorprende en absoluto”, y añadió que “Foradori tendrá que rendir cuentas de lo que haya dicho y hecho”.