La alianza de Juntos en Entre Ríos no atraviesa su mejor momento. La relación entre la UCR y el PRO está tensa. Sucede que tras la visita de hace semanas de la titular del partido amarillo, Patricia Bullrich, al programa de Mirtha Legrand, donde utilizó al fallecido exintendente Sergio Varisco como un ejemplo de corrupción dentro de Cambiemos, las diferencias internas que ya existían terminaron de estallar.

Y es que, a partir de la comparación que hizo Bullrich sobre el caso del exjefe comunal de Paraná, quien fue condenado en 2019 a seis años de prisión como “partícipe necesario” del delito de comercialización de estupefacientes, lavado de dinero y narcotráfico, con el de la banda Los Monos, su hija, la diputada provincial de la UCR, Lucía Varisco, estalló.

“No es novedad la falta de escrúpulos y el accionar nefasto de Patricia Bullrich, que fue responsable junto a Rogelio Frigerio y Néstor Roncaglia de armar una causa contra mi padre, Sergio Varisco”, aseguró días después de lo dicho por la exministra de Seguridad. “A través de esa farsa, pretendían la renuncia de mi papá a la intendencia y el fin de su carrera política, para que asuma la entonces viceintendenta que era del PRO y allanarle así el camino a Frigerio para su candidatura a la gobernación”, recordó luego.

Y cerró: “Las declaraciones de Bullrich representan un nuevo ataque directo y deliberado hacia nuestro espacio político con el mismo propósito de seguir haciéndonos daño. Miente descaradamente cuando habla de ‘la mano dura con los propios’ teniendo en cuenta de que se ocuparon especialmente de que el concejal del PRO que también estaba mencionado en la causa, tenga un tratamiento privilegiado durante la investigación”.

Esta intervención provocó la reacción de los diputados del PRO. Y desde entonces la violencia discursiva entre ambas partes de la alianza, no se detiene.

En concreto, el PRO busca que la legisladora abandone el bloque. Algo que la UCR no quiere pedirle, pero que, a la vez, busca solucionar.

Luego de la última sesión en la Legislatura local, un grupo de diputados radicales y del PRO se reunieron para encontrarle una salida pacífica al conflicto. Pero por el momento no hubo solución. La UCR busca dilatar el tema para intentar calmar las aguas y desde adentro aseguraron que darán intervención al Comité provincial. Pero desde la conducción entrerriana del radicalismo descartaron entrometerse.

La relación de Varisco con su propio partido no es la mejor. En las últimas elecciones como no consiguió espacio para pelear por adentro se presentó como candidata del Partido Fe, y es por eso que alguno le marcan sus vínculos con el peronismo.

El problema es que el PRO está firme y asegura que si no deja el bloque, los que se irán serán ellos.

Se trata de una puja que resiente el vínculo de Juntos en la previa de lo que serán las elecciones con el exministro del Interior, Frigerio, ya lanzado como principal candidato a gobernador por el partido amarillo.