El Gobierno puso fin al Procrear y habilita "hipotecas divisibles" para desarrollos inmobiliarios
Las dos disposiciones se publicaron en el Boletín Oficial. Cómo se gestionan los créditos otorgados.
Cómo lo había adelantado el vocero Manuel Adorni, el Gobierno disolvió por decreto el plan Procrear, que se había puesto en marcha durante el gobierno de Cristina Kirchner, para promover el acceso a la vivienda mediante créditos subsidiados por el Estado.
Al mismo tiempo, con otro decreto habilitó las llamadas “hipotecas divisibles” para financiar los desarrollos inmobiliarios y emprendimientos desde el pozo, una iniciativa destinada específicamente a la banca privada.
“Hoy sacamos DNU creando la “hipoteca de bien futuro”. Esto es realmente un hito histórico del crédito hipotecario en nuestro país. Va a permitir financiar vía hipotecas, proyectos nuevos y/o no escriturados. Proyectos en pozo, y con boleto simplemente. Es un cambio de paradigma en la industria, que apunta a impulsar al mismo el crédito hipotecario y los desarrollos inmobiliarios”, escribió en su cuenta de X, el ministro de Eonomía, Luis Caputo.
“La base del crédito hipotecario es una garantía real, pero la misma no podía ejercerse cuando una familia compraba en una propuesta inmobiliaria que estaba en construcción (o en pozo, como suele conocerse). Desde ahora el sistema financiero tendrá la posibilidad de otorgar hipotecarios para la adquisición de unidades a construir en dichos complejos. También podrá inscribir los boletos en el registro de la propiedad y negociarlos libremente”, amplió a su vez el ministro Federico Sturzenegger.
“Nada de lo que aquí se sugiere son imposiciones u obligaciones. Se trata de ampliar las opciones de operación del mercado. Por eso decimos que para cada necesidad habrá un mercado porque muchas veces el mercado no puede proveer una solución porque el Estado lo impide. Liberadas las restricciones el resto corre por cuenta del sector privado. Hoy, al sumar un nuevo activo subyacente, se amplían las posibilidades de financiamiento de la construcción. VLLC!”, agregó.
El decreto que pone fin al Procrear enfatiza que la financiación de la construcción de viviendas es, principalmente, una actividad que debería estar en manos de instituciones financieras privadas y públicas, sin intervención estatal directa.
En este sentido, el Gobierno sostiene que, tras las reformas del Banco Central para reducir la inflación y fomentar los créditos hipotecarios, es el momento adecuado para que el Estado deje de intervenir en el sector inmobiliario.
Cómo se gestionan los créditos
El Ministerio de Economía será el encargado de realizar la liquidación del fondo que administraba el Procera, siguiendo las disposiciones del decreto y de los contratos existentes. Esto incluye la administración de bienes inmuebles del Pro.Cre.Ar y la posibilidad de transferirlos a provincias, municipios y otros organismos estatales en caso de que ya no estén en uso.
Una de las principales preocupaciones de los beneficiarios actuales de Pro.Cre.Ar es qué ocurrirá con sus créditos hipotecarios. En respuesta a esto, el decreto establece que el Ministerio de Economía firmará un contrato con el Banco Hipotecario S.A. para asegurar la continuidad de la gestión de los créditos bajo las mismas condiciones de retribución ya pactadas.
Así, los titulares de estos créditos no verán alteradas sus condiciones de pago o financiamiento. Al mismo tiempo, mediante decreto 1017/2024, publicado en el Boletín Oficial, se estableció en la misma línea, la implementación de "hipotecas divisibles sobre inmuebles destinados a proyectos inmobiliarios, permitiendo su futura división y adhesión al régimen de propiedad horizontal, conjuntos inmobiliarios o la subdivisión de parcelas de dominio común".
Esta medida está orientada a proyectos inmobiliarios en desarrollo, con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda, incentivar la inversión privada y contribuir a la reactivación económica, según se indicó.