Como era de esperar, la llegada de Sergio Massa al gabinete nacional tuvo su impacto directo en Tigre. Sucede que la relación entre el superministro y el jefe comunal, Julio Zamora, está quebrada. Según le aseguran desde adentro a este medio, “sin posibilidad de dar marcha atrás”.

En el distrito el ascenso del líder del Frente Renovador, no cayó bien. Entienden que Massa tomará un poder que, con el correr del tiempo, se tornará en contra de los deseos del intendente de continuar al mando del municipio.

Claro, como es sabido, todo dependerá de cómo salgan las cosas a nivel nacional. Sin embargo, hay algo que no escapa a la lógica. Y es que el funcionario nacional pondrá el ojo en el municipio con el fin de promover, “de una vez por todas”, dicen fuentes consultadas, la candidatura a jefa comunal de la presidenta de AySA, Malena Galmarini.

A nivel local, las cosas no están bien. Todo terminó de quedar expuesto cuando el Frente Renovador decidió abstenerse a la hora de votar la rendición de cuentas del 2021 en mayo pasado, cuando el jefe comunal logró aprobarla gracias al apoyo de los 11 concejales del bloque de Juntos.

La puja entre Zamora y el massismo tiene larga data. Y hoy cada uno trabaja por su parte. El jefe comunal con todos los puestos del ejecutivo representados en dirigentes propios y el Frente Renovador con un peso deliberativo preponderante: con 9 de los 12 concejales del Frente de Todos a favor.

“Hoy Tigre está muy triste. La llegada de Sergio nos va a servir a nosotros para que la Nación ponga el ojo en el distrito como venimos haciendo desde AySA”, le dice a Data Clave la concejal del FR Mayra Mariani, quien desde hace años trabaja bien cerca de Galmarini. Y agrega: “Hoy el diálogo con el intendente es nulo. Trabajamos los proyectos siempre entre nosotros pero nos cuesta tener su acompañamiento”.

En la misma línea, Micaela Ferraro sostuvo días atrás sobre el arribo al gabinete nacional de Sergio Massa que “tenemos muchas expectativas porque su figura ha sido un faro para la región cuando dirigió el municipio". Y añadió: "Conocemos el liderazgo y la capacidad de gestión que tiene, más aún en los momentos difíciles. Sabemos que también gestionará para solucionar todo lo que Tigre necesita, que dejó de ser lo que fue con él y antes con (Ricardo) Ubieto, y está un poco deslucido".

La distancia interna es evidente. Cabe recordar que Zamora logró mantener su posicionamiento en el cierre de listas de 2019 y también de 2021. Pero desde el massismo sentencian que “no se cumplieron los acuerdos”.

Ahora, lo que quedo a la vista, es que Malena Galmarini irá con más fuerza que nunca por el liderazgo del ejecutivo municipal. “Quiero que Malena sea intendenta. Es un animal de laburo. Y la gente te lo hace saber. Te recuerda todo el tiempo las cosas que se lograron cuando ella era funcionaria local”, le asegura a Data Clave, Mariani. Y suma: “Cuando llegamos a AySA había 93 obras frenadas y ahora tenemos 1500 en ejecución. No para. Y cuando laburás con ella ves de lo que es capaz”.

Lo que resta por ver es cómo se irán acomodando las piezas de cara al 2023.