Dudas y acusaciones cruzadas por el "cóctel de medicamentos" que tomaba Diego Maradona
La muerte del máximo ídolo de los argentinos generó una polémica a partir de los cuidados que recibió en los días previos al trágico desenlace, sobre todo después de su más reciente operación. ¿Cómo fueron esas últimas horas? ¿Quién controlaba y suministraba los medicamentos que tenía que tomar?
Lo ocurrido durante las últimas horas de Diego Maradona son motivo de una exhaustiva investigación judicial. "Hay versiones cruzadas respecto al último momento en el que se lo vio con vida y distintas acusaciones acerca de cómo fue la atención que recibió, sobre todo, en esa mañana final antes de su lamentable fallecimiento", relató a Data Clave una fuente con acceso al expediente..
A instancias de las distintas declaraciones testimoniales del personal de enfermería que lo asistió, la Fiscalía General de San Isidro reconstruyó que Maradona fue visto vivo por última vez a 6:30 de la mañana, en un cambio de guardia de los profesionales que lo acompañaban. A esa hora, dormía con normalidad.
Sin embargo, según las anotaciones realizadas por el coordinador del servicio de enfermería, a las 9:30 de la mañana Diego "se negó a tomar control de signos vitales" y pasadas las 11 de la mañana constataron que "el paciente no tenía pulso".
Distinta a esa versión es otra que consignaron desde el propio entorno de Maradona. "Diego se despertó cerca de las 11 de la mañana de muy mal humor y se encerró en la pieza", sostiene una fuente que habló con este portal. Según este testimonio, se escuchaban ruidos y pasos dentro de la habitación y el equipo de atención médica esperaba afuera. "Había que darle una medicación al mediodía por lo cual, cuando dejaron de oirse ruidos, el personal de salud ingresó y ahí lo encontraron inconsciente e intentaron reanimarlo sin éxito", completó el informante.
Las contradicciones entre las versiones de las declaraciones testimoniales llaman la atención de los fiscales. Mientras tanto, se busca establecer si hubo algún tipo de negligencia en la atención que recibió el Diez. La responsabilidad en cuestión no solo recaería sobre el personal que lo asistió en sus últimos días, sino también en el doctor Leopoldo Luque, que le otorgó el alta médica después de la operación y Matías Morla, uno de los referentes del entorno "maradoniano".
"Mala praxis" y "abandono de persona" son las dos figuras legales que podrían caber para el entorno profesional que rodeaba al astro futbolístico de comprobarse alguna de las hipótesis que tienen en carpeta los investigadores. "Aun no hay elementos contundentes que conduzcan a verificar esas figuras, pero no descartamos que aparezcan", confirmó otra fuente. Desde la familia de Diego, la principal acusación apunta hacia su apoderado, Matías Morla y a Luque. "Nadie controlaba lo que tomaba para dormir", le dijo un allegado a Data Clave.
Para el lunes está prevista la declaración testimonial del neurocirujano, que podrá -o no- echar luz sobre algunos de los contrapuntos evidenciados en la reconstrucción de lo sucedido. Pero también hay dos datos que emanarán de las pericias con los que los fiscales preven definir una hipótesis concreta: el examen histopatológico y la data de muerte.
Con el primero se podrá establecer qué sustancias había en el organismo de Diego y si pudieron haber incidido en el desenlace fatal. Y la segunda conclusión permitirá establecer con precisión en qué momento Maradona dejó de existir. Definiciones fundamentales para establecer el rumbo de la causa.