Dos legisladores del Frente de Todos presentaron hoy un proyecto de ley en la Cámara de Diputados en la que buscan convertir en obligatoria la vacuna contra el coronavirus para mayores de 18 años y para menores de entre 3 y 17 años que presenten factores de riesgo. Diferencias dentro de la coalición por el criterio de aplicación.

La iniciativa fue impulsada por diputada nacional por Salta, Verónica Caliva, y su par Juan Carlos Alderete, de la Provincia de Buenos Aires, los sectores vinculados mas a la "izquierda" de la coalición oficialista.

El proyecto tiene un total de siete artículos y lo que propone centralmente es incorporar el esquema de vacunación completo contra el SARS CoV-2 (COVID-19) al Calendario Nacional de Vacunación, sumado a que plantea la obligatoriedad de la inoculación, de acuerdo a los esquemas que fije el ministerio de Salud nacional.

"La vacunación contra el SARS CoV-2 (COVID-19) con esquema completo también será obligatoria para los niños y las niñas de entre 3 y 17 años que presenten comorbilidades y/o enfermedades de riesgo debidamente certificadas por personal médico", plantea el artículo 2.

A su vez, en su artículo 3 informa que "la administración de las dosis de la vacuna contra el SARS CoV-2 establecida en los artículos precedentes no requerirá la presentación de una orden médica".

Entre los fundamentos, los legisladores sostienen que "nos encontramos actualmente en un estado de emergencia sanitaria, la aparición de la nueva cepa variante Ómicron que en pocos días ha aumentado a nivel mundial de manera exponencial debido a su gran contagiosidad, ya se refleja claramente en nuestro país, superando los cien mil casos confirmados por día. Los números de los contagios y muertes indican que la pandemia lejos está de haberse terminado".

"Entre las medidas de prevención adoptadas alrededor del mundo para el control de la pandemia, las vacunas han demostrado ser una de las formas más seguras y efectivas, ya sea disminuyendo la morbimortalidad o bien la transmisión del virus", plantean Caliva y Alderete en el proyecto que firmaron únicamente ellos y que no pasó por la Comisión de Salud que también maneja el oficialismo en la Cámara Baja.

Juan Carlos Alderete es un dirigente social que lidera la Corriente Clasista y Combativa e integra el Partido Comunista Revolucionario que está dentro de la coalición del Frente de Todos. Tanto él como Caliva adelantaron que, si el proyecto del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) pasa por el Congreso, ellos se opondrán.

Verónica Caliva y Juan Carlos Alderete, una dupla que expresa una mirada minoritaria dentro del Frente de Todos

"El desarrollo y despliegue de una vacuna segura y eficaz para prevenir el COVID-19 es determinante para lograr controlar el desarrollo de la enfermedad. Por ello, contar con una vacuna no solo permite mejorar sustancialmente el cuidado de la vida y la salud de los y las habitantes del país, sino también permitirá ir restableciendo en plenitud las actividades económicas y sociales. Para ello necesitamos que toda nuestra población esté vacunada", dice el proyecto que exige la obligatoriedad de la vacuna.

Desde otros sectores del Frente de Todos le manifestaron en off a Data Clave que "no están todos en la línea" de plantear una vacunación obligatoria, sobre todo porque Argentina ya cuenta con niveles altos de inmunidad por su cultura de aceptación a la vacuna. De hecho, entienden que plantear la idea es "ganarse una discusión sin sentido", ya que el pase sanitario y el aumento de casos contribuyó al aumento de inoculados. Además, desde la coalición sostienen que las medidas las viene tomando el ministerio de Salud en el Consejo Federal de Salud (COFESA), en acuerdo con todos los minitros sanitarios de las provincias.

"Si se aprueba ese proyecto, todas las vacunas del calendario, que ya son obligatorias por la ley de vacunas, quedarían en una situación de menor obligatoriedad", le agrega otra fuente del Congreso nacional a Data Clave.

Según el Monitor Público de Vacunación, dependiente del Ministerio de Salud, al día miércoles un total de 93.854.553 dosis fueron distribuídas en el territorio, sobre las cuales se aplicaron 83.336.360: 39.117.750 correspondientes al esquema inicial y 34.186.054, al esquema completo, mientras que 2.956.763 pertenecen a una dosis adicional y 7.075.793 a una dosis de refuerzo.

En tanto, los autores del proyecto, fundamentan: "Estamos frente a un crecimiento exponencial de circulación viral de una variante de SARS CoV2, variante Delta en nuestro país, sumada a la aparición de la variante Ómicron, dotadas ambas de mayor potencial infeccioso respecto de todas las variantes que han surgido previamente. Por lo que resulta imperante instrumentar de modo urgente las medidas necesarias a fin de evitar un incremento sustancial en el número de personas infectadas en nuestro país, habida cuenta de la dificultad en controlar las curvas crecientes de infección, una vez que las mismas han adquirido una pendiente significativa. Con la vacunación masiva y obligatoria para todas las personas, completando los esquemas vigentes, se asegurará una mayor protección para el conjunto de la población".

"La Argentina ha avanzado notablemente en la cobertura de la vacunación anti SARS-CoV-2 en los últimos meses, sin embargo, existen segmentos de la población que aún no se han vacunado, o no han completado el esquema de vacunación, pese a que han sido convocados a tal fin. La cobertura de más del 92% de los mayores de 40 años con una dosis, o de más del 85% con ambas dosis, demuestran que mayoritariamente la población respondió a la convocatoria, restando sectores o grupos que aún deben incorporarse al programa de vacunación, a lo que debemos sumar la aplicación de la tercera dosis según el grupo etario correspondiente", concluyen.