Denuncian al abogado del jubilado de Quilmes por "delitos contra la integridad sexual"
Una testigo del hecho que protagonizó Jorge Ríos radicó una denuncia ante la justicia de Quilmes contra Marino Aparicio Cid. Lo acusa de "haber incurrido en conductas que intimidan, vulneran y agravian la integridad sexual".
Los tribunales de Quilmes no tienen paz. A tal punto que buena parte de los hechos relatados en la denuncia contra Marino Cid Aparicio, el abogado del jubilado Jorge Ríos, ocurrieron dentro del propio edificio donde funcionan los juzgados. Fue presentada de forma virtual y patrocinada por la letrada Valeria Carreras.
Una testigo presencial de la madrugada en la que Jorge Ríos disparó y mató a uno de los delincuentes que entró a robar a su domicilio contó ahora que fue abordada de manera indebida en distintas ocasiones por el abogado el mismo día que este la acompañó a presentar su testimonio.
“Los hechos denunciados son graves pero lo peor es que son habituales Las mujeres sopórtanos este tipo de conductas a diario. No se reclama y no se denuncia porque no se suele evaluar la gravedad Con el tiempo se naturaliza y se padece en silencio", le dijo a este medio la abogada Valeria Carreras.
En la denuncia a la que accedió en exclusiva Data Clave, P.S. (se preserva su identidad) detalló como Cid Aparicio la hizo sentir incómoda una y otra vez el día de su declaración. El abogado insistió en hacerle preguntas de índole personal durante toda la jornada y llegó incluso a consultar sobre "el tipo de bikini" que la testigo utilizaba en la playa, mientras esperaba para dar declaración. Además, le mostró imágenes de pornografía explícita desde su teléfono celular.
"Sentía el roce de la pierna del abogado y mi incomodidad aumentaba", contó la denunciante, y agregó: "Fue interminable esa audiencia testimonial, hasta que la persona que tomaba la declaración pidió que no hubiera más interrupciones ni distracciones. Sentí cierto alivio".
Explicó además que la situación de acoso no terminó allí, ya que Cid Aparicio la llamó la mañana siguiente con una excusa relacionada a la causa pero continuó rápidamente con actitudes de acoso similares.
"Esta vez es más grave por el contexto y por el daño producido a la víctima. La relación de poder es desigual", señaló la abogada Carreras. "El abuso de poder se ve en el dominio de la escena que en ese momento, en el ámbito judicial y en medio de la causa con mayor repercusión mediática y de tan alto impacto en la población, en ese escenario, y de la mano de quien maneja la causa de quien representa la defensa del vecino de la víctima", agregó. La denuncia fue remita a la Unidad Fiscal de Instrucción nº 8 a cargo de Alejandro Ruggeri.