De besar pechugas a vender pollos: la nueva vida del "diputeta" Ameri
El ex legislador nacional fue noticia en septiembre de 2020, durante la pandemia de coronavirus, cuando durante una sesión virtual de la Cámara baja le besó los pechos a su mujer. El pasado lunes fue condenado a un mes de prisión. Cómo es su vida luego del escándalo.
El ex diputado nacional del Frente de Todos, Juan Ameri, fue condenado el pasado lunes a un mes de prisión en suspenso por el delito de perturbación al ejercicio de funciones públicas. El 24 de septiembre de 2020, en plena pandemia de Covid-19, protagonizó un escandalo que repercutió en el país y en el mundo cuando, en una sesión virtual del Congreso, le besó los pechos a su novia frente a la cámara. Tras el fallo, el salteño brindó una entrevista para La Nación, en donde criticó la decisión de la justicia y contó cómo es su vida en la actualidad.
Aquella tarde de septiembre, los diputados debatían sobre el “Fondo de Garantía de Sustentabilidad del sistema jubilatorio y la refinanciación de la deuda de las provincia con la ANSES". Mientras tenía la palabra Carlos Heller, en uno de los cuadros se pudo ver a Ameri bajándole el escote de la remera a su mujer y, frente a las cámaras, le besó los senos. Al advertir la escena, el por aquel entonces presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, llamó a votación para suspender al legislador salteño. La decisión fue por unanimidad. Esa misma noche, Ameri renunció a su banca.
“Estoy muy mal. Pensé que se había caído internet. Vino mi pareja a mostrarme cómo le quedaron las prótesis mamarias. Y le di un beso en la teta, eso fue todo”, declaró en ese momento el ex diputado, quien al mes siguiente fue imputado por la justicia salteña por “estorbo al acto funcional”, que castiga con 15 días a 6 meses de prisión. En marzo de este año, el juez federal impuso la condena a un mes de prisión en suspenso por el delito de “perturbación del orden de los cuerpos legislativos”. El lunes pasado, la sentencia fue confirmada por los jueces de la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, Gustavo Hornos, Javier Carbajo y Mariano Borinsky, de manera unánime.
El salteño contó que sigue viviendo en la provincia de Buenos Aires, en un monoblock en el barrio “Sitra” de Ingeniero Budge. “Estoy trabajando en un negocio familiar, una productora avícula, vendemos alimentos derivados de pollo, supremas, huevos... Trabajo todo el día, desde las ocho de la mañana hasta el mediodía. Ahí salgo para almorzar, me acuesto y duermo una hora... y a las cuatro me levanto y vuelvo a abrir el negocio hasta las ocho y media”, señaló Ameri en la entrevista brindada en La Nación. Además, señaló que el fallo de la justicia fue “vergonzoso” y aseguró: “Aunque la condena haya sido ínfima, voy a apelar hasta la Corte Suprema y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, voy a ir hasta el final”.
Ameri apuntó contra los medios de comunicación por cómo trataron el hecho y dio detalles de la difícil situación personal que atravesó. “Debo haber pensado 100 maneras de distintas de suicidarme y si no lo hice no fue por cobarde o falta de voluntad, fue porque durante seis meses se instalaron en mi casa compañeros que no me dejaron solo en ningún momento, a ellos les debo la vida”, afirmó el ex diputado del Frente de Todos.
Asimismo, opinó sobre la situación social de la Argentina, afirmó que “la persona que hace política nunca deja de hacer política” y señaló que ve como un “gran candidato” al gobernado bonaerense Axel Kicillof. “Si vivís en la provincia de Buenos Aires no hay forma que no te guste Axel”, opinó el ex legislador. Además, criticó a la actual gestión de Javier Milei porque ve como “están cerrando los negocios” y aseguró: "Mi familia siempre se dedicó al comercio y siempre los hemos abierto con gobiernos peronistas y nos hemos fundido con gobiernos liberales".
Por último, se animó a pensar en una futura vuelta en la política. “Creo que alguien como yo puede ser más útil en la formación política de los jóvenes y adultos... ¡eso le hace falta a este país! Porque han llegado tipos como Macri o tipos que hablan ¡con sus perros muertos!”, vaticinó el ex diputado.