Los jefes comunales del Frente de Todos en el Gran Buenos Aires se reunieron este lunes en el Parque Domínico de Avellaneda y enviaron un mensaje directo al gobierno nacional. Los jefes comunales saben que para mantener en orden el pago chico deben diferenciarse de los dos principales problemas que hoy afectan al país y que no son de su injerencia: la inflación y la seguridad.

Los intendentes dejaron en claro su postura y se encontraron para una foto de unidad que busque darle mayor impacto con el fin de poder iniciar el recorrido por el territorio, ya en clave electoral, con una idea fina: hacer foco en los avances a nivel local y correrse de la mira de la oposición que baja a los distritos con la estrategia del bolsillo en la inseguridad.

Se trató de un encuentro con la participación de buena parte de los jefes comunales de los diferentes sectores que integran el Frente de Todos. De ahí que no llamara la atención la ausencia del presidente del PJ bonaerense y diputado nacional, Máximo Kirchner. La Cámpora dijo presente con Mayra Mendoza (Quilmes), Juani Ustarroz (Mercedes) y Damián Selci (Hurlingham); el Movimiento Evita con Mariel Fernández (Moreno); el Frente Grande con Mario Secco (Ensenada); y el Frente Renovador con Juan Andreotti (San Fernando) y Javier Osuna (General Las Heras).

Sin embargo, no todos los alcaldes fueron de la partida. Blanca Cantero, Fernando Diz, David Angueira, Ricardo Curutchet, Mario Ishii y Fernando Gray no asistieron. Estos dos últimos faltaron sin aviso.

Mientras el jefe comunal de José C. Paz no suele anotarse para las reuniones que le tocan la oreja al presidente Alberto Fernández; Gray directamente ya dejó de formar parte de todo tipo de encuentro desde que el líder de La Cámpora lo corrió de la presidencia del PJ provincial.

También llamó la atención la presencia de Julio Zamora, quien junto al  jefe comunal de Esteban Echeverría, son los únicos dos referentes peronistas que caminan sin la referencia de un dirigente provincial o nacional.

Lo que no sorprendió fue la intrusión de dos exjefes comunales que hoy no cumplen esa función, que ni siquiera están de licencia pero que, se sabe, tienen fuerte injerencia en el territorio. Se trata de Julio Pereyra, el cacique histórico de Florencio Varela y Gustavo Arrieta en representación de cañuelas, donde gobierna su pareja, Marisa Fassi.

Se trató, también, de una de las pocas veces que coincidieron los siete intendentes del Conurbano que dieron el salto a Nación y a Provincia y que, según afirman desde adentro, a partir de noviembre podrían comenzar a pegar la vuelta para iniciar el proceso de reelección al menos, según marca la actual ley, por un mandato más.

De esta manera, los ministros nacionales Gabriel Katopodis, Juanchi Zabaleta y Jorge Ferraresi; más los dos bonaerenses, Martín Insaurralde y Leo Nardini; se sumaron al encuentro del que también formaron parte el diputado bonaerense Mariano Cascallares y el presidente del BAPRO, Gustavo Menéndez. Todos en perfecta armonía con sus reemplazantes. Salvo, como ya se conoce, el funcionario a cargo de Desarrollo Social quien tiene serias diferencias con Selci, de La Cámpora, en Hurlingham.

“No se habló de las PASO. No fue necesario. Todos sabemos lo que pensamos”, le dijo a Data Clave uno de los asistentes. Sin embargo, no es tan así como aclara. Sucede que las posiciones no son las mismas. El Movimiento Evita, por caso, ya hizo saber su deseo de que se sostengan las primarias. Algo que, por el contrario, desde un sector del Frente Renovador, buscan eliminar.