El viernes último la primera plana oficialista lució una foto para mostrar unidad en el fin de este sinuoso 2020 y en el comienzo de lo que será un difícil 2021 que incluirá elecciones de medio término, donde se testeará el ánimo de la ciudadanía y el grado de apoyo a la gestión del Frente de Todos. El acto contó con una importante cobertura periodística y generó muchísimas repercusiones políticas.

Veinticuatro horas después y con un casi nulo rebote mediático el presidente Alberto Fernández le dedicó dos horas a debatir con dirigentes de varios partidos y espacios que integran esta heterogénea coalición sobre el momento que atraviesa la Argentina y el rumbo que debería tomar el gobierno durante su segundo año de gestión. 

El mandatario participó de un zoom que coordinaron Alejandro Mosquera, Ricardo Forster y Alejandro Grimson (estos dos últimos, asesores presidenciales), y del que participaron, entre otros, Mariano Pinedo y Gabriel Mariotto (Compromiso Federal); Juan Carlos Junio y Carlos Heller (PSOL); Gustavo López (FORJA), Juan Carlos Campagnoli (Espacio Puebla); Claudio Lozano (Unidad Popular), Carlos Castagnetto (Kolina); Tania Caputo (Partido Comunista); Jorge Rivas y Oscar González (Socialistas para la Victoria), Jorge Selser (Proyecto Sur) y Mempo Giardinelli (Manifiesto Argentino). 

"Que el presidente le haya dedicado dos horas a charlar con estos compañeros es un buen signo", aseguró uno de los participantes

Los planteos de los intervinientes fueron diversos pero mayoritariamente apuntaron a cuestionar la inconveniencia de tomar decisiones en la mesa chica, sin consultar al resto de la coalición. “No se puede cerrar todo con (Sergio) Massa y La Cámpora, hay que darle más bola a los sindicatos, a los gobernadores y a los partidos más chicos de la coalición, es necesario armar una mesa política”, explicó uno de los asistentes a Data Clave. Exigieron, además, “un programa y reglas de juego, para dejar de ser un frente electoral y transformarnos en un frente político, con capacidad transformadora”.

Tras escuchar con atención las intervenciones de los participantes, el presidente se mostró receptivo a los planteos y aceptó de buen grado la constitución de ese espacio para la toma de decisiones. "El peronismo es un movimiento donde todo se debate, así que tomo la idea y la vamos a implementar" fueron las palabras de Fernández.

Otro de los dirigentes que estuvo presente en el zoom destacó la actitud del mandatario. "Que el presidente le haya dedicado dos horas a charlar con este conjunto de compañeros y compañeras que formamos parte de los partidos más pequeños del Frente es un buen signo de apertura y nos genera expectativas respecto a la posibilidad de incidir en las decisiones de gobierno", afirmó la fuente.

En el libro “Qué es el Peronismo” (siglo veintiuno, 2019), del antropólogo y asesor presidencial Alejandro Grimson (que acompañó a Alberto en el zoom del sábado), se describe que sobre el final del segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner, “desde que comenzaron las dificultades económicas, el gobierno se volcó a ´defender lo logrado´, sin registrar adecuadamente las demandas que crecían en la sociedad ni dialogar con ella a partir de la construcción de un plan de cambios”. 

Algo de eso le reclamaron estos partidos al Presidente. “Alberto cree que estamos muy bien y que el problema principal que tenemos es la pandemia y nosotros no lo vemos con esa misma perspectiva, la pandemia es un lastre, pero está lejos de ser el mayor de los problemas”, reflexionó otro de los dirigentes que estuvo virtualmente presente el sábado. 

La ingeniería no será sencilla. Son varios los actores que reclaman mayor participación, en días que la cintura del gobierno se angosta y la presión de la vicepresidenta crece.  

La interna del PJ

Un ámbito que será clave para definir candidaturas y discutir el rumbo del Gobierno es el Partido Justicialista (PJ), que cierra el año con elecciones postergadas por la pandemia y las diferencias internas, pese a que hace unos meses José Luis Gioja (presidente del PJ) había coincidido junto a la CGT en que el partido debía ser conducido por Alberto Fernández, al frente de una lista de unidad. 

Algunos de los que participaron del meeting virtual forman parte de una lista alternativa al oficialismo partidario presentada ante la jueza electoral María Romilda Servini encabezada por el gobernador puntano Alberto Rodríguez Saá y por la dirigente jujeña Milagro Sala. “La idea nuestra es que haya una lista de unidad, que no es lo mismo que una lista única”, le expresaron al Presidente.

La fecha que convoca al PJ es ahora el 21 de marzo de 2021. Y el mensaje de estos dirigentes apunta a Gioja, al que cuestionan por querer marginarlos y acelerar las fechas con ese fin. “Gioja armó una jugada para no perder pie, con Alberto Fernández de mascarón de proa”, dijo a este medio otro de los participantes, que pidió “ser considerados como uno de los sectores del espacio del Frente de Todos”.