Al momento de las elecciones habrá Inflación en baja y recuperación salarial
Las tarifas congeladas y el dólar “anclado” ayudarán a llegar a noviembre con este escenario. La pregunta es qué pasará el día después.
Planes de compra en hasta 18 cuotas, los reajustes de los salarios acordados en paritaria y la economía creciendo por la “normalización” es el escenario que ven las consultoras Ecolatina y Equilibra desde el mes próximo y hasta noviembre, cuando se realicen las PASO y las elecciones legislativas.
“El PBI llegará a las elecciones en alza: estimamos que crecerá medio punto en el tercero y un punto en el cuarto, cerrando el año con una recuperación en torno al 7%”, destacó Equilibra en su último informe.
Junto con esto “el poder de compra de los salarios evidenciará una mejora de 3 puntos porcentuales en el tercer trimestre, que se traducen en 5 kilos de asado más”.
De manera coincidente, desde Ecoltina apuntaron a que “programas como ‘Ahora 12’, que alientan el consumo en cuotas de bienes durables, marcan que la prioridad del gobierno es apuntalar la recuperación de la actividad”.
“En la misma línea se inscribe la reapertura de paritarias”, por lo que “de esta forma, el poder adquisitivo tendría su mejor semestre desde 2017, pudiendo fortalecer el consumo de los hogares”, destacó Ecolatina.
Por el lado de los precios, Equilibra apunta a que “el anclaje de dólar y tarifas permitirá que la inflación descienda por debajo del 3% mensual”.
De esta manera, la inflación anualizada del segundo semestre rozará el 39%, “lo que implica una desaceleración importante respecto al 57% anualizado de la primera mitad del año”, agregó la consultora que dirige Miguel Bossio.
Dicho de otra forma, desde Ecolatina señalaron que “la inflación bajará pasando de un promedio mensual de 4% en el primer semestre a otro de 3% en el segundo”.
“El gran problema es que esta baja no será duradera, sino que se volverá insostenible por su propio peso. Cuando las anclas son forzadas y se acumulan atrasos, la dinámica termina pasando factura más temprano que tarde. En consecuencia, no solo tendremos una inflación mayor al 40% en 2021: también será así en 2022”, advirtió Ecolatina.
“El costo fiscal de las medidas de push electoral rondará el 1,5% del PBI”, detalló Equilibra, y apuntó que para financiarlo, “el Tesoro deberá acudir a asistencia del BCRA por $ 680.000 millones en lo que resta del año” por lo que “la pregunta del millón es si el mercado financiero podrá digerir semejante volumen de pesos sin una devaluación o ensanchamiento de la brecha”.