Abuso en la Escuela de Aviación Militar: una historia de complicidades que afecta al brigadier Monetto
En 2019, una cadete fue abusada sexualmente por dos estudiantes de una promoción anterior. La mujer hizo la denuncia institucional y judicial, lo que la llevó a padecer maltratos, sanciones, hostigamiento y, finalmente, a la expulsión. El brigadier Marcelo Monetto, uno de los propuestos por el ministro Petri para ascender, fue director de la Escuela entre 2022 y 2023 y, aunque debía reincorporar a la cadete y pagarle los salarios adeudados, no lo cumplió.
La madrugada del 19 de mayo de 2019, Leonardo Daniel Espíndola y Julio Mauricio Méndez, dos cadetes de cuarto año de la Escuela de Aviación Militar de Córdoba y perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina, fueron a una fiesta organizada por otro grupo de cadetes a la que no estaban invitados.
Allí, se acercaron a una chica de 19 años y le propusieron un encuentro sexual. Como la joven (cadete de segundo año de la EAM) los rechazó, la forzaron y abusaron sexualmente durante esa madrugada y la mañana siguiente.
Cuando hizo la denuncia judicial, a lo que los superiores de la Fuerza Aérea se negaban, el personal civil y militar de la institución le hizo relatar los hechos siete veces. Una y otra vez, repasando y pasando por su tormento. No le creían o decían no creerle. La trataron de "mentirosa", e incluso de "amoral".
Según su testimonio ante la Justicia, los responsables de la Escuela, en su interrogatorio, le preguntaron si lo había disfrutado; le dijeron que era normal tener algún tipo de intercambio sexual a cambio de privilegios; y sobre todo le sugirieron de mil maneras que no denunciara el hecho para no afectar a su carrera y a la institución.
Un día después de ocurrido el abuso y tras poner en conocimiento de las autoridades lo sucedido, la joven recibió 12 sanciones de parte de sus superiores. No fueron las únicas: en junio también le aplicaron sanciones. En febrero de 2021, la denunciante pidió permiso porque fue citada a declarar por parte del Ministerio Público Fiscal de Córdoba. Sin embargo, fue sancionada con una “falta grave” por haber “mentido" para tener un franco, pese a que presentó la notificación judicial por correo electrónico.
La mujer relató que durante meses le negaron alimento, le revolvían la habitación cada tanto en busca de objetos robados, y los compañeros de los abusadores la acosaron y maltrataron cada vez que la cruzaron en el comedor, los pasillos, las aulas o los dormitorios. Finalmente la joven fue "licenciada" de la Escuela -una licencia indefinida que parecía una expulsión permanente- por decisión de las autoridades que debían protegerla.
La muchacha entonces recurrió a los superiores de la misma institución y pidió se revean sus castigos acorde al Código de Disciplina Militar: lo solicitó en la Escuela de Aviación Militar, en las FAA y hasta en la dirección de políticas de género y DDHH del Ministerio de Defensa.
El paso a paso de los hostigamientos recibidos fue detallado en el caso que tuvo a su cargo el juez federal de Córdoba Miguel Hugo Vaca Narvaja por la separación de la denunciante de su puesto en la escuela de Aviación.
“Entiendo que el acto de notificación de 9 sanciones en esa fecha, (un día después de haber denunciado un hecho de abuso sexual por compañeros de la misma fuerza) cobra efectos intimidatorios y de hostigamiento por la situación de vulnerabilidad de la amparista”, explicó el juez Vaca Narvaja en el expediente civil.
“Se destacan reiteradas sanciones que justamente le asignaban un bajo rendimiento. Pues, surge del sentido común el siguiente interrogante: ¿Cómo no tenerlo, después de haber denunciado haber sido víctima de una agresión sexual?. No hubo una respuesta adecuada de la Institución, a la situación de crisis”, analizó el magistrado en el fallo donde se le ordenó a la Escuela que la reincorpore.
El juez federal también cuestionó a la Escuela de Aviación Militar por no contar con un protocolo para este tipo de situaciones. “De las constancias de la causa se refleja que ni las autoridades responsables legales de la Fuerza Aérea Argentina, ni las de la Escuela de Aviación Militar actuaron conforme protocolo para atención de víctimas que denunciaron una agresión sexual”, puntualizó.
El entonces director de la Escuela de Aviación Militar comodoro mayor Marcelo Monetto durante 2022 y 2023, hoy brigadier, fue intimado a la reincorporación inmediata de la alumna, del mismo modo que al pago de los salarios correspondientes y de manera retroactiva, algo que se cumplió en parte en julio de 2022 cuando la reincorporaron para volver a expulsarla un día antes del cierre del año. Nunca le pagaron los salarios.
En marzo de 2022, cuando debía haber sido reincorporada -y no en julio, a mitad de año, como efectivamente fue- la joven se presentó ante Monetto en su despacho. Luego declaró haberse sentido humillada y maltratada con actitudes que describió como "me hacía notar que yo era menos que él y que mi futuro dependía de sus decisiones"
Por las constantes amenazas, la joven se fue del país. Un día antes de sentarse en el banquillo de los acusados el año pasado, Espíndola, que llevaba la peor parte acusatoria, se suicidó. Méndez fue condenado a tres años de prisión. La actitud “corporativa defensiva” de las autoridades militares quedó corroborada, así como también quedaron claros los "actos de represalia y revictimización" contra la joven.
Además de la causa por abuso y el expediente que llevó el magistrado Vaca Narvaja donde quedaron expuestos los maltratos y hostigamientos, se abrió un expediente en la justicia federal de Córdoba por esa inacción y el hostigamiento.
Hace poco más de una semana, los funcionarios Cristina Malpartida (jefa del Escuadrón Sanidad de la Escuela de Aviación Militar); Julieta del Valle Romero -oficial médica del mismo escuadrón-; Andrea Cecilia Berra -psicóloga de la EAM y docente de la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea Argentina-; Luis Ramiro Carranza Torres, el vicecomodoro del Cuerpo de Servicios del Escalafón Jurídico y a cargo del Departamento Jurídico de la EAM; y Gerardo Ulises Moreno, miembro del Escuadrón de Instrucción de la misma institución fueron procesados por abuso de autoridad en un contexto de violencia de género.
Para el juez Alejandro Sánchez Freytes, los cinco involucrados “demoraron y obstaculizaron la salida de la cadete para realizar la denuncia penal correspondiente” y la forzaron a relatar los hechos muchas veces “sometiéndola a interrogatorios innecesarios, con cuestionamientos revictimizantes y estigmatizantes, intentando convencerla de no denunciar”.
Incluso, el magistrado federal hizo foco en que los imputados obstaculizaron la aplicación del protocolo que se sigue en casos de abuso sexual, lo que significó una demora la presentación en el Hospital Rawson para la ingesta de los antirretrovirales.
Nada de todos los maltratos que sufrió la víctima ocurrieron sin el conocimiento de los superiores, específicamente del director de la escuela, el Brigadier Marcelo Monetto, hoy Director General de Planeamiento Estratégico (DGPE) del Estado Mayor Conjunto (EMCO) y uno de los candidatos propuestos por el ministro Luis Petri para un ascenso.