La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires sancionó este jueves la ley de "actualización, formación continua y desarrollo profesional de los docentes".

La iniciativa implica modificaciones en el Estatuto del Docente de la Ciudad y contó con el apoyo de los bloques Vamos Juntos (VJ), Partido Socialista (PS), Republicanos Unidos (RU), Unión Cívica Radical – Evolución (UCR-Ev). Frente de Todos (FdT), Frente de Izquierda (FIT) y La Libertad Avanza (LLA) rechazaron el texto.

Al recinto llegó un dictamen elaborado por la Comisión de Educación presidida por la diputada Manuela Thourte (UCR/Evolución). "El proyecto busca mejorar los aprendizajes de los alumnos, a través de nuevas oportunidades de formación docente. Hoy un docente tarda entre 15 y 20 años en poder ascender a un cargo de mayor jerarquía", explicó Thourte en una entrevista.

Y continuó: "Lo que estamos buscando con el proyecto es dar oportunidades para aquellos docentes que quieren permanecer en el aula, para que hagan una formación específica en aquellos conocimientos que hacen falta profundizar en base a los aprendizajes y fortalezas que debemos apuntalar en los alumnos".

La legisladora porteña detalló que con el proyecto los "docentes podrán hacer esta formación recibiendo un incentivo salarial para ella y estos docentes van a estar destinados a aquellas escuelas de la ciudad que tengan una vulnerabilidad socioeducativa mayor".

La iniciativa también crea tres nuevos cargos en la carrera docente: maestro especialista, coordinador de trayectorias y preceptor tutor.

En la puerta del palacio legislativo, los gremios UTE y Ademys mostraron su malestar y llevaron adelante una protesta contra la reforma. También reclamaron la reapertura de la Mesa Salarial y la titularización masiva de los educadores.

Tras la votación, se registraron algunos incidentes en las inmediaciones, cuando un grupo de manifestantes intentó acercarse a la entrada del edificio y efectivos de la Policía de la Ciudad bloquearon su avance.