Algunos de los dirigentes políticos que más admiran a Donald Trump en América Latina, son el presidente argentino Javier Milei, el de El Salvador, Nayib Bukele, y el expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro.

El norteamericano asumió un nuevo mandato presidencial y les prodigó a Milei y Bukele elogiosos comentarios por la forma en que llevan adelante la administración de sus países.

Los dos fueron invitados a la ceremonia de asunción. "Javier, te quiero felicitar por el trabajo que has hecho, por hacer Argentina grande de nuevo. Es increíble cómo la estás arreglando y es un honor que estés aquí", le dijo Trump a Milei cuando se vieron después de que ganara las elecciones el 5 de noviembre.

Bolsonaro también quería asistir a la gala pero en condición de “amigo”, ya que no tiene en la actualidad ningún cargo oficial. Y además tiene una causa por haber intentado motorizar un golpe de Estado, cuando Lula lo derrotó en las elecciones.

Por ese motivo, el pasaporte de Bolsonaro está en poder de la Justicia. Pese a todo, el expresidente presentó un pedido para que lo dejaran viajar a los Estados Unidos para la ceremonia de Trump.

Pero el juez Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, rechazó la semana pasada la solicitud. Se trata de la cuarta ocasión en que el STF niega la devolución del documento a Bolsonaro, ya que según el fallo no presentó la invitación formal para asistir a la toma de posesión en Estados Unidos.

"No se adjuntó (...) ningún documento probatorio que demostrara la existencia de una invitación realizada por el presidente electo de Estados Unidos al solicitante", afirmó Moraes tal como argumentó la defensa del exmandatario brasileño.

El pasaporte le fue retenido a Bolsonaro por la Policía Federal (PF) desde febrero de 2024, debido a las investigaciones por su presunta participación en un intento de golpe de Estado para mantenerlo en el poder.

De acuerdo con el fallo, desde que el pasaporte le fue retenido no ha habido ningún cambio que justifique la suspensión de la medida, además de que hay indicios de que el político brasileño podría intentar huir del país.

"El escenario que fundamentó la imposición de la prohibición de ausentarse del país, junto con la entrega del pasaporte, sigue indicando la posibilidad de intento de evasión del imputado, Jair Messias Bolsonaro, para eludir la aplicación de la ley", señala.

En noviembre del año pasado, Bolsonaro y otras personas fueron imputadas por la PF de intento de golpe de Estado y abolición violenta del estado democrático de derecho.

El caso está bajo análisis de la Procuraduría General de la República, institución que en febrero próximo debe decidir si los investigados serán o no denunciados ante el STF.