El Vaticano, estricto: pedirá pase sanitario a los empleados y sancionará a no vacunados
El cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, publicó un decreto de siete artículos con los nuevos protocolos sanitarios, en el marco de la variante Ómicron. Los trabajadores que no se inoculen no podrán ingresar a sus puestos y recibirán una "ausencia injustificada".
El Vaticano, en línea con los gobiernos de Europa y ante el avance de la variante Ómicron, anunció que sus empleados tendrán que contar con el pase sanitario para poder seguir trabajando. Además, a partir del 31 de enero de 2022, pedirán la obligación de la tercera dosis para todo el personal que esté en contacto con el público.
A través de un decreto de siete artículos, el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, dispuso hoy que el "el personal sin un pase verde válido que acredite, exclusivamente, el estado de vacunación contra el SARS-CoV-2 o recuperación del virus del SARS- CoV-2 no podrá acceder al lugar de trabajo y debe considerarse ausente injustificada".
La ausencia, según el decreto dado a conocer hoy, llevará "la consecuente suspensión de la retribución mientras dure el ausentismo, sin perjuicio de las deducciones previsionales y asistenciales, así como la asignación a la unidad familiar".
Al mismo tiempo, "la prolongación injustificada de la ausencia del lugar de trabajo tendrá la consecuencias previstas por el Reglamento General de la Curia Romana".
El Vaticano que conduce el Papa Francisco se alineó con los gobiernos, en el marco de la estrategia sanitaria mundial para evitar una nueva cuarentena por la disparada de casos de coronavirus.
En Argentina, el último caso que se conoció fue el desplante de un cura bonaerense contra Axel Kicillof, donde implantó el pase sanitario que rige a partir del 21 de diciembre, donde se pide esquema de vacunación completo para poder ingresar a eventos masivos, tanto al aire libre como cerrados.
Por otra parte, la Cámara de Comercio de Argentina, reclamó al Gobierno que aplique sanciones para los trabajadores que no quieran vacunarse y que pongan en riesgo a otros compañeros de trabajo.
Entre las disposiciones firmadas por Parolin para el nuevo funcionamiento del Vaticano, se encuentra además la extensión de la obligación de vacunación para entrar a cualquier oficina de la Santa Sede a "colaboradores externos y a quienes de cualquier modo desarrollen actividades en los mismos Órganos, al personal de la empresas externas y a todos los visitantes y usuarios".
Por otra parte, el Vaticano dispuso que "todos los que prestan servicio en contacto con el público" deban tener, a partir del 31 de enero, la tercera dosis de vacuna anticovid, segunda en el caso de haber recibido el fármaco de Johnson & Johnson en primera instancia.