El Papa Francisco pidió voluntad política por la “renegociación de la deuda” para “los países más necesitados”
El Sumo Pontífice reclamó compromiso para “cambiar las cosas” a nivel mundial. “Es un gesto que ayudará a los pueblos a desarrollarse”, declaró.
El Papa Francisco pidió que haya una “férrea voluntad política” por la “renegociación de la carga de la deuda” para “los países más necesitados” y con el fin de “cambiar las cosas” a nivel mundial.
El Sumo Pontífice envió una carta a Grynspan Mayufis, titular de la Secretaría General Iberoamericana, y le pidió que haya “particular consideración a la necesidad de reformar la arquitectura internacional de la deuda, como parte integrante de nuestra respuesta común a la pandemia”.
Para Francisco “la renegociación de la carga de deuda de los países más necesitados es un gesto que ayudará a los pueblos a desarrollarse, a tener acceso a las vacunas, a la salud, a la educación y al empleo”.
En ese marco, agregó que “tal gesto debe ir acompañado por la puesta en práctica de sólidas políticas económicas y por una buena administración que llegue a los más pobres”.
Esta fuerte postura pública se da una semana después de recibir en el Vaticano al ministro de Economía, Martín Guzmán, que tiene como eje lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para reestructurar la deuda.
Francisco destacó “la urgencia de tomar medidas que permitan el acceso a una financiación externa, a través de una nueva emisión de Derechos Especiales de Giro, llamando a una mayor solidaridad entre los Países”.
Esa iniciativa, para el Papa, debe consentir “que los fondos sean destinados para impulsar y alentar el desarrollo económico y productivo, con el fin de que todos puedan salir de la actual situación con las mejores posibilidades de recuperación”.
“Nada de esto será posible sin una férrea voluntad política que tenga la valentía de decidir cambiar las cosas, principalmente las prioridades, para que no sean los pobres los que paguen el costo más alto de estos dramas que están golpeando a nuestra familia humana”, exclamó luego Jorge Bergoglio.
Por último, tomó postura también sobre la disputa mundial por las vacunas contra el covid-19: “La inmunización extensiva debería ser considerada como un bien común universal, noción que requiere acciones concretas que inspiren todo el proceso de investigación, producción y distribución de las vacunas”.